Guardia Civil de España investiga un caso que ha conmocionado a la localidad de Alberche del Caudillo, en Toledo, donde el 9 de septiembre fue hallado el cuerpo sin vida de un recién nacido dentro de un congelador, en la vivienda de su madre, una mujer de 40 años con antecedentes de adicciones y bajo seguimiento de los Servicios Sociales.
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De acuerdo con la investigación, la mujer habría dado a luz en su domicilio y ocultado al bebé en el electrodoméstico. La alerta fue emitida por la abuela materna, quien mantenía contacto con los Servicios Sociales debido a la situación de riesgo que atravesaba la familia.
La madre tiene otros cuatro hijos, tres de ellos bajo custodia paterna y uno en proceso de adopción a cargo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Autoridades de bienestar social lamentaron no haber podido intervenir a tiempo, ya que la mujer no acudió a ningún centro sanitario para el parto, lo que impidió detectar el alumbramiento.
En un inicio, la mujer aseguró que sufrió un aborto espontáneo y que ocultó el cuerpo por pánico. Sin embargo, la autopsia determinará si el bebé nació con vida, hecho clave para establecer el tipo de delito.
La pareja sentimental de la mujer también está implicada en el caso. Aunque tenía una orden de alejamiento, convivía con ella en las últimas semanas. Tras incumplir esa medida fue detenido, y posteriormente ambos fueron arrestados por la Guardia Civil.
El Tribunal de Instancia Sección Penal 5 de Talavera de la Reina decretó prisión provisional, comunicada y sin fianza para los dos, investigados provisionalmente por asesinato.
El hallazgo ha conmocionado a Alberche del Caudillo, un municipio de apenas 1.700 habitantes, mientras la investigación continúa para determinar si el bebé nació vivo. En ese caso, las penas para los acusados podrían alcanzar hasta los 25 años de prisión.