En una ceremonia histórica presidida por el papa León XIV este 7 de septiembre en la Plaza de San Pedro, Carlo Acutis fue declarado santo, convirtiéndose así en el primer santo “milenial” de la Iglesia católica. El joven italiano, fallecido en 2006 a los 15 años a causa de una leucemia, es reconocido por su profunda fe y por haber utilizado internet como herramienta de evangelización.
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La canonización, originalmente programada para abril, pero pospuesta tras el fallecimiento del papa Francisco, congregó a cientos de fieles en el Vaticano y fue seguida mediante pantallas instaladas en Asís (Italia), ciudad donde reposan sus restos. Junto a Acutis, también fue canonizado el italiano Pier Giorgio Frassati, conocido por su caridad hacia los más necesitados.
Nacido en Londres en 1991 y criado en Milán, Acutis destacó desde niño por su espiritualidad, su amor por la eucaristía —que llamaba “mi autopista hacia el cielo”— y su preocupación por los más vulnerables. Aunque provenía de una familia adinerada, dedicó sus conocimientos en informática a crear sitios web católicos y difundir milagros eucarísticos, lo que le valió el título de “patrón de internet”.
Su muerte en 2006 conmovió por la serenidad con la que enfrentó la enfermedad, ofreciendo su sufrimiento “por el Papa y la Iglesia”. Dos milagros le fueron atribuidos —uno en Brasil (2010) y otro en Costa Rica (2022)—, lo que permitió su beatificación en 2020 y ahora su canonización.
Acutis se presenta como un modelo de santidad contemporánea: un joven que supo compaginar su fe con su pasión por el saxofón, el fútbol y los videojuegos, demostrando que la espiritualidad y la vida cotidiana pueden ir de la mano, incluso en la era digital.