El piloto español Pedro Acosta protagonizó un momento de alto riesgo durante los entrenamientos del Gran Premio de Hungría de MotoGP al sufrir una fuerte caída que terminó con su motocicleta deslizándose directamente hacia un camarógrafo que se encontraba junto a la pista.
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El incidente ocurrió cuando Acosta perdió el control de su vehículo en una curva, saliendo despedido y provocando que la moto se deslizara a gran velocidad hacia la zona de seguridad donde se encontraba el operador de cámara. En un reflejo instantáneo, el camarógrafo logró esquivar por centímetros la motocicleta que se dirigía hacia él.
Afortunadamente, tanto el piloto de Red Bull KTM como el camarógrafo resultaron ilesos tras el susto. Acosta se levantó por sus propios medios y regresó a boxes, mientras que el operador continuó su trabajo tras confirmar que no había sufrido daños.