Un vuelo de Condor Airlines entre Corfú (Grecia) y Düsseldorf (Alemania) vivió un inusual incidente el pasado sábado cuando el motor derecho del Boeing 757 comenzó a expulsar llamaradas visibles a 11,000 metros de altura, aproximadamente 40 minutos después del despegue.
PUBLICIDAD
De acuerdo con un portavoz de la aerolínea alemana, las llamas fueron provocadas por una “reacción química” que generó una combustión fuera del motor, pero en ningún momento se trató de un incendio real en el interior del mismo.
El vuelo DE3665, con 273 pasajeros y 8 tripulantes a bordo, realizó un aterrizaje de emergencia preventivo en Bríndisi (Italia). La aerolínea aseguró que en ningún momento existió riesgo para la seguridad de las personas.
El avión permanece bajo revisión técnica mientras se investigan las causas exactas del fenómeno. Condor Airlines reiteró que la seguridad es su prioridad y que este tipo de eventos, aunque impactantes visualmente, fueron manejados según los protocolos establecidos.