Guatemala, México y Belice se unen para salvaguardar la Gran Selva Maya en una firma que marca un hito en la protección ambiental.
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El 15 de agosto, estos tres países dieron un paso histórico al consolidar el Corredor Biocultural Gran Selva Maya, un espacio transfronterizo que abarca más de 2.4 millones de hectáreas, reconocido como la segunda selva tropical más grande del mundo después del Amazonas.
El presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo, destacó que la iniciativa “honra la historia y el presente al comprometernos con las generaciones futuras”, subrayando la importancia de proteger la biodiversidad y los modos de vida que dependen de este ecosistema único.
Durante la reunión, los tres países reafirmaron su compromiso con la protección de este invaluable recurso natural, en alianza con organizaciones ambientales, la academia y la sociedad civil.
El acuerdo representa un compromiso mutuo y regional para resguardar la selva, la vida y la biodiversidad frente a los retos actuales y futuros.