La actriz Kylie Page, conocida por su trabajo en la industria del cine para adultos y su participación en la docuserie de Netflix “Hot Girls Wanted: Turned On”, fue encontrada muerta el 25 de junio en su casa de Los Ángeles. El forense del condado confirmó el deceso, pero aún no ha determinado la causa.
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Page, quien usaba de nombre artístico “Bonnie Kinz”, inició su carrera en 2016 y protagonizó más de 200 películas, trabajando con estudios como Vixen Media Group y Brazzers, este último la despidió con un emotivo mensaje en X: “La recordaremos por su risa, amabilidad y por llevar luz a todos”.
La actriz había hablado abiertamente sobre sus luchas con las adicciones en el documental de Netflix, que explora los desafíos de la industria. Su familia creó una GoFundMe para repatriar su cuerpo a Oklahoma, describiéndola como “una hija amorosa y una amiga leal”.
Su agencia, Hussie Models, la recordó como “una persona llena de vida y bondad”. El caso reabre el debate sobre los riesgos en el mundo del entretenimiento para adultos.
