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Olaf Scholz no da su brazo a torcer y se niega adelantar las elecciones en Alemania

El dirigente alemán se opone a realizar lo propuesto por Emmanuel Macron en Francia

El canciller Olaf Scholz, no adelantaría las elecciones en Alemania. (AP Foto/Alessandra Tarantino) AP (Alessandra Tarantino/AP)

La reciente y fuerte escalada de la ultraderecha en la Unión Europea (UE), sigue dejando sus secuelas en esta segunda semana del mes de junio.

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La situación hizo que, por ejemplo, Emmanuel Macron disolviera el Parlamente francés y anunciara el adelanto de los comicios electorales, situación que además de llamar la atención, hace esperar que otros mandatarios europeos sigan su ejemplo para tratar de suavizar la dura derrota del último fin de semana.

Quien se diferenció por completo y se niega a dar su brazo a torcer es el canciller alemán, Olaf Scholz, al anunciar en las últimas horas que se mantendrá firme en su cargo, advirtiendo que ni la ultraderecha ni nadie lo obligará a seguir los pasos del presidente francés y convocar a elecciones anticipadas.

“En ningún momento, ni por un segundo, se planteó la idea de que en Alemania se pudieran convocar ahora nuevas elecciones”, explicó el portavoz oficial, Steffen Hebestreit.

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El presidente francés Emmanuel Macron, fue uno de los grandes derrotados el domingo 9 de junio de 2014. (Ludovic Marin, Pool vía AP) AP (Ludovic Marin/AP)

Diferencias de panorama entre Scholz y Macron

Cabe destacar que tanto Scholz como Macron, fueron los grandes derrotados hace tan sólo dos días atrás, tomando de esta manera un gran protagonismo triunfante la premier italiana, Giorgia Meloni; el joven referente de la ultraderecha francesa, Jordan Bardella, y la creciente Alternativa para Alemania (AfD).

A diferencia de Emmanuel Macron, al aceptar Olaf Scholz, convocar a elecciones presidenciales en Alemania y se produjera una hipotética derrota, simplemente sería el fin de sus días como uno de los máximos referentes políticos germanos.

En cambio, el panorama es muy distinto para el presidente francés, ya que de perder en las próximas elecciones previstas para el 29 de junio y el 7 de julio, en dos turnos, mantendría su cargo de la presidencia con un gobierno de cohabitación junto a un partido opositor encargado de designar a un primer ministro y su gabinete.

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