El presidente, Bernardo Arévalo, participó este jueves en la sesión solemne en el Congreso por el 39 aniversario de la Constitución de la República.
PUBLICIDAD
Te presentamos diez frases que resumen el discurso que el mandatario ofreció en el Palacio Legislativo.
“Hace cuarenta años, Guatemala celebró su primera elección con algunas garantías democráticas, después de décadas de autoritarismo, en el marco de un conflicto armado que enfrentaba a hermanos, dividía familias, y fragmentaba a la Nación. Fue en ese contexto de violencia política y autoritarismo en el que se integró la Asamblea Nacional que redactó nuestra Constitución Política”.
“Es cierto, la violencia política de grandes proporciones es cosa del pasado. Pero la polarización, la desinformación, la criminalización del adversario que se ha manejado en épocas recientes, amenaza con hacernos retroceder. Hemos celebrado diez elecciones generales de forma exitosa”.
“Y aunque nuestro sistema no es perfecto, no existen dudas sobre la legitimidad de sus resultados, y de las autoridades electas, incluyendo los 160 diputados que integran este Congreso, los alcaldes y corporaciones municipales de todo el país, y el Presidente y la Vicepresidenta de la República”.
“Nuestro último proceso electoral fue convulso y agitado, y vivimos días de mucha incertidumbre que finalmente se resolvieron en el marco de nuestra legislación electoral y nuestro sistema constitucional”.
“Porque la Constitución es nuestra referencia. Es nuestro máximo acuerdo político. Es el principal instrumento para organizar la vida política. Es nuestra garantía contra las soluciones de fuerza y contra el autoritarismo”.
PUBLICIDAD
“Esta es una sociedad que ha manifestado expresamente su voluntad inquebrantable de cambio. Su ánimo impetuoso de ver hacia el futuro. Su determinación de ser el constructor de un futuro diferente”.
“Ustedes, los diputados y diputadas de la décima legislatura, así como la vicepresidenta Karin Herrera y su servidor, el Presidente de la República, somos portadores de un mandato inconfundible que nos ha dado el pueblo: Guatemala debe cambiar”.
“La dirección de ese cambio está delineada en nuestra Constitución. Su primer y segundo artículo lo establece: y cito: ‘..el Estado de Guatemala se organiza para proteger a la persona y a la familia; su fin supremo es la realización del bien común. Es su deber garantizar a los habitantes de la República la vida, la libertad, la justicia, la seguridad, la paz y el desarrollo integral de la persona’”.
“La misma constitución invita al Gobierno y al Congreso a coordinar esfuerzos. Por una parte, le otorga a la presidente iniciativa de ley: por otra, le otorga al Congreso facultades de fiscalización de la obra del Ejecutivo. Nos vincula en la aprobación del presupuesto, en la convocatoria a consultas populares, y en muchas otras decisiones”.
“La próxima elección de la Corte Suprema de Justicia es un buen momento para avanzar. El Congreso tiene la oportunidad de posicionarse a favor de la independencia judicial, a favor de la República, en defensa del pueblo de Guatemala.
También hay reformas electorales pendientes, que nos permitirán mejorar y defender nuestra democracia y su sistema de partidos políticos”.
