El Ministerio Público y la Policía Nacional Civil realizaron ayer un allanamiento en la sede de Save the Children en la zona 9 capitalina. Según el MP, la diligencia es en seguimiento a una investigación de “carácter transnacional” que abarca acciones que podrían estar relacionadas a vulneraciones y abusos en contra de la niñez guatemalteca.
Por su parte, la ONG emitió un comunicado en donde reafirma su postura en la defensa de los derechos de los niños, niñas y adolescentes en el mundo. “Defendemos los derechos de niños, niñas y adolescentes, y garantizamos que sobrevivan, aprendan y estén protegidos ante cualquier daño en más de 100 países de todo el mundo”, afirman.
“Nos ha impactado y desconcertado el registro sin precedentes de nuestras oficinas por parte del Ministerio Público de Guatemala. No se nos dio a conocer ninguna acusación específica, y no hay evidencias que respalden ninguna acusación de conducta indebida. Seguimos dedicados a proporcionar ayuda en contextos humanitarias y de desarrollo a los niños, niñas, adolescentes y sus familias en Guatemala”, dice la institución.
Durante casi 50 años la institución ha trabajado en Guatemala con diferentes ministerios y municipalidades en programas de salud y nutrición para la niñez, acceso a la educación y alimentación en el sistema escolar público, y asistencia a niños, niñas, adolescentes y sus familias durante emergencias.
“ Hemos protegido a la niñez de cualquier abuso de sus derechos. No facilitamos -y nunca lo hemos hecho- el traslado de niños, niñas o adolescentes fuera de Guatemala”, afirman.
En el documento también refieren que durante décadas han trabajado en favor de la niñez de Guatemala hablan de su compromiso y responsabilidad con los niños, niñas, adolescentes y las familias con las que trabajan, garantizando siempre la protección de los beneficiarios.
“Como una respetada organización internacional con sede en el Reino Unido, nos atenemos a las normas más estrictas en materia de protección de la niñez y administración financiera. También rendimos cuentas ante la Comisión de Organizaciones Benéficas del Reino Unido y nuestros libros son auditados anualmente por múltiples donantes”, argumentan.