Lo que no se nombra, no existe; hay que ponerle nombre, rostro y alto a la violencia.
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Con el propósito de educar y promover los derechos sexuales y reproductivos, de mujeres jóvenes, migrantes, LBTI, mujeres con discapacidad y que viven con VIH en Guatemala. Nace la iniciativa “Pongámosle Nombre”, promovida por 12 organizaciones y colectivas que trabajan en favor de los derechos de las mujeres en el país.
“Pongámosle Nombre” surge para fomentar la inclusión y la diversidad en Guatemala, romper las barreras de discriminación y violencia, ofrecer apoyo y recursos a aquellas mujeres que enfrentan situaciones de discriminación debido a su expresión e identidad de género, orientación sexual, origen, pueblo originario, comunidad lingüística, capacidades físicas e intelectuales.
La campaña educativa, se enfoca en abordar desafíos críticos, evidenciando problemáticas que muchas veces no se exponen. Gilda Menchú de la Asociación IDEI ubicada en Quetzaltenango, comenta, “¿Cuántas veces hemos escuchado o repetido frases cómo?: “Sólo era un halago”, “Tú te lo buscaste”, ¿”La educación sexual promueve la promiscuidad”? Todas estas afirmaciones a menudo se usan para ocultar y normalizar la violenta realidad que viven miles de mujeres en Guatemala”.
Cifras sobre violencia en Guatemala
Cada día, 176 niñas y adolescentes son madres en Guatemala. De acuerdo con el INE, en 2021 se registraron 64,341 nacimientos de madres entre 10 a 19 años. De ellos, 1,805 corresponden a niñas de 10 a 14 años, registrándose la mayor proporción de nacimientos entre madres de estas edades en Petén, Izabal y Huehuetenango.
Durante 2021, al menos 63 de cada diez mil mujeres fueron agraviadas por femicidio y otras formas de violencia en contra de la mujer. Adicionalmente, el país reportó un promedio de 18 mujeres agraviadas de violación.
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El 2021 registró un incremento en la población víctima de violencia intrafamiliar tanto en hombres como en mujeres, con un alza del 28.9% con relación al 2020. El número de personas víctimas registrada en 2021 fue la cifra más alta reportada en los últimos 11 años.
“La concientización es el primer paso para combatir la violencia y promover el cambio. Lo que no se nombra, no existe, por ello hay que ponerle nombre, rostro y alto a la violencia”, enfatizó, Gilda Menchú de la Asociación IDEI.
Por su parte Magnolia Dubón, de la organización Tan Ux’il ubicada en Petén, comenta que es importante abordar esta problemática, ya que, cuando se conoce qué está pasando, se le puede poner un alto, tomando consciencia de la realidad, y cuando se ponen leyes se puede responsabilizar a los culpables.
Para obtener más información sobre la iniciativa Pongámosle Nombre, o para contactarse con las organizaciones y colectivas, las personas pueden visitar el sitio web oficial de la campaña www.pongamoslenombre.org.
Para denuncias de violencia comunicarse directamente al número de teléfono de del Observatorio de las Mujeres del Ministerio Público: 1572.
