Entre los temas que nunca faltan en las playlists navideñas está “Last Christmas”, el éxito atemporal que George Michael y Andrew Ridgeley lanzaron bajo el nombre de Wham! y que hoy sigue dominando las listas de reproducción festivas alrededor del mundo. Sin embargo, detrás de su ritmo suave y su aire nostálgico se esconde una historia mucho más oscura.
Para George Michael, la Navidad estuvo ligada a algunos de los episodios más dolorosos de su vida: desde la enfermedad y muerte de su gran amor, hasta su propia partida y la de una de las personas más importantes de su círculo íntimo. Con el paso del tiempo, las coincidencias han llevado a muchos fans a preguntarse si existe una “maldición” alrededor de la fecha y de la canción que lo hizo eterno.
La persecución mediática que marcó una época
En la década de los 90, George Michael no solo era una de las grandes voces del pop, también se convirtió en blanco constante de la prensa sensacionalista británica. Los tabloides estaban obsesionados con exponer su orientación sexual, a pesar de que él aún no se había declarado abiertamente gay, lo que lo obligó a vivir sus relaciones en secreto y bajo un escrutinio diario.
En medio de ese ambiente hostil, el cantante conoció al diseñador brasileño Anselmo Feleppa durante una visita a Brasil en 1990. Lo que comenzó como un flechazo se transformó en una relación profunda y significativa, que se mantuvo casi en la clandestinidad.
La primera gran tragedia llegó precisamente en temporada decembrina. En una entrevista concedida años después, George Michael recordó que Anselmo voló a Londres para contarle en persona que tenía VIH, pero decidió esperar al Año Nuevo para no arruinarle la Navidad. Menos de dos años después, falleció, dejando una herida emocional que George nunca terminó de sanar. Desde entonces para él cada Navidad estaba teñida de recuerdo y ausencia.
La última Navidad de la voz de “Last Christmas”
Con el paso del tiempo, las Navidades se convirtieron para George Michael en una mezcla de nostalgia, éxito comercial y dolor personal. Mientras ‘Last Christmas’ sonaba una y otra vez en radio, tiendas y reuniones familiares, él lidiaba con adicciones, problemas de salud y una vida privada marcada por la soledad.
El 25 de diciembre de 2016, la fecha que parecía perseguirlo lo alcanzó de la forma más devastadora: George Michael murió a los 53 años en su casa, a causa de un paro cardíaco relacionado con sus problemas de adicción. De acuerdo con los reportes, pasó la Navidad solo dentro de su hogar. Su entonces pareja, Fadi Fawaz, habría dormido en el auto tras una discusión y lo encontró sin vida al día siguiente.
La imagen del ícono pop muriendo en silencio durante la misma fecha en la que su villancico pop sigue sonando en todo el mundo se volvió tan simbólica como desgarradora.
Tres años después, el dolor volvió a tocar a la familia. El 24 de diciembre de 2019, Melanie Panayiotou, hermana, confidente y heredera de George Michael, murió a los 59 años a causa de un coma diabético. Otra pérdida devastadora ocurrida, de nuevo, en vísperas de Navidad.
Las coincidencias fueron suficientes para que comenzaran a circular teorías entre fans: algunos hablaron de una “maldición” ligada tanto a la fecha como a ‘Last Christmas’; otros sugirieron que las tragedias eran el reflejo del profundo desgaste emocional que acompañó los últimos años del cantante.