Los síntomas del estrés pueden afectar tu salud, aunque no te des cuenta de ello. Haz ejercicio mientras estudias, te relajará.
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Quizás pienses que una enfermedad sea la culpable del dolor de cabeza persistente, el insomnio o la disminución de tu productividad en los estudios.
Pero, en realidad, el culpable probablemente sea el estrés, que, además, si no se controla, puede desencadenar muchos problemas de salud, como presión arterial alta, enfermedades cardiacas, obesidad y hasta la diabetes.
Si tienes síntomas de estrés, tomar medidas para controlarlo puede traerte muchos beneficios para tu salud y con ello rendirás mejor en los cursos.
Explora diversas estrategias de manejo del estrés, como el ejercicio, la opción más recomendada por médicos y expertos en el tema.
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Y es que hacer ejercicio permite alargar la vida, además de los múltiples beneficios para la salud y el organismo.
Recientemente, un estudio realizado en el centro médico académico estadounidense Cleveland Clinic, con sede en Ohio, reveló que:
“No hacer ninguna actividad física puede ser incluso más perjudicial que fumar”.
Prácticamente cualquier tipo de ejercicio, desde los aeróbicos hasta el yoga, puede ayudar a aliviar el estrés. Aun si no eres deportista o si no estás en forma, un poco de ejercicio puede contribuir en gran medida al manejo del estrés.
El ejercicio aumenta tu sentido de bienestar, lo que aporta energía a tu ritmo de vida todos los días.
Y si estás a punto de empezar tu vida con estudios a nivel superior o, aún más estresante, estudiar y trabajar al mismo tiempo… ojo, no te estreses y ejercítate con periodicidad.
Consultamos al head coach Jacinto López, experto en el tema, para ayudarte en tu nueva etapa de universitario.
¿Cómo el ejercicio ayuda a combatir el estrés, mejorar el estado de ánimo y rendir mejor en la universidad?
Al realizar ejercicio nuestro cuerpo libera endorfinas, que son las hormonas de la felicidad, y estas actúan como un calmante natural en nuestro sistema nervioso, haciéndonos sentir relajados al terminar la actividad física y durante el día tenemos una sensación de paz y bienestar.
Solemos sufrir de estrés por el tráfico, la universidad, el trabajo y las largas distancias, una buena opción es buscar incluir actividad física mientras nos dirigimos de un punto a otro. Por ejemplo, ir trotando a la universidad o el fin de semana trotar con los amigos en busca de finalizar en un buen restaurante para almorzar.
Prácticamente cualquier forma de ejercicio o movimiento puede aumentar tu nivel de estado físico y disminuir el estrés.
Para un estudiante que empieza la universidad, lo más importante es elegir una actividad que disfrute. Por ejemplo, caminar, subir escaleras o trotar, pero hacerlo para evitar la deserción universitaria.
¿Cuál sería una rutina adecuada de running para estudiantes principiantes?
Para una persona que apenas está iniciando en el running se sugiere comenzar con una rutina de ambientación, es decir que se aumente poco a poco el kilometraje con uno o dos kilómetros hasta llegar a cinco kilómetros, esto para que el cuerpo se adapte y prevenir futuras lesiones.
Estas rutinas se combinan con ejercicios de fortalecimiento y técnica.
Lo más importante es salir poco a poco a las calles, descubrir y armar tu propia ruta de running en el barrio para después, con el tiempo, recorrer grandes distancias.
Quizá sea conveniente que hables con el médico antes de comenzar una nueva rutina de ejercicios si hace un tiempo que no te ejercitas o si tienes problemas de salud.
¿Cuáles lugares en la ciudad recomiendas para hacer ejercicio (aparte de los tradicionales parques)?
Correr por las calles de la ciudad es liberador; para empoderar a todos a experimentar y disfrutar la emoción del running urbano, aconsejo siempre a quienes quieren comenzar a correr usar siluetas de desempeño dinámicas y versátiles como PureBoost Go, una tecnología en calzado que sirve para adaptarse a las necesidades del running en la ciudad y asegura tu salud al ejercitarte.
Ahora bien, es recomendable buscar recorridos de varios kilómetros para realizar los fondos, ya que, aunque generalmente es posible hacer los entrenamientos en parques, es bueno tratar con recorridos y terrenos variados que podemos encontrar más fácilmente por las calles de los barrios o a las afueras de la ciudad, evitando el tráfico y así tener más tranquilidad.
¿Qué tan cierto es que se debe caminar antes de comenzar a correr?
Esto depende de la persona. Cuando se trata de alguien que lleva una vida sedentaria y nunca ha realizado algún tipo de actividad física, sí es necesario que inicie con caminata para prevenir infartos; si en cambio se trata de una persona que acostumbra a caminar, por ejemplo, a su trabajo, y se mueve constantemente, puede iniciar con un trote suave.
Cuatro tips para ejercitarte
Comenzar un programa de ejercicios es apenas el primer paso. Aquí te damos algunos consejos para seguir una rutina:
1. Objetivos inteligentes
Escribe y plantéate objetivos específicos, cuantificables y sobre todo reales. Si tu meta es reducir el estrés ahora que empezarás la universidad, puedes comprometerte a caminar durante la hora del almuerzo tres veces por semana.
2. Busca a un amigo
Saber que alguien te espera o te acompaña en el gimnasio o en el parque puede ser un gran incentivo. Entrenar con un amigo, un compañero de trabajo o un familiar con frecuencia aporta un nuevo nivel de motivación y compromiso con el ejercicio.
3. Cambia la rutina
Si siempre fuiste un corredor competitivo, analiza otras opciones menos competitivas que puedan ayudarte a reducir el estrés, como pilates o clases de yoga.
4. Ejercicio en intervalos
Los periodos cortos de actividad también son beneficiosos. Por ejemplo, si no puedes incluir una caminata de 30 minutos, intenta hacer tres caminatas de 10 minutos.
- Ahora que ya eres mayor de edad, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos recomienda un mínimo semanal de 150 minutos de actividad aeróbica moderada (como caminar a paso ligero o nadar) o de 75 minutos de actividad aeróbica intensa (como correr).
- También puedes hacer una combinación de actividad moderada e intensa.