Consejos para mantener tus labios impecables a pesar del frío

Los cambios climáticos afectan mucho la piel, pero sobre todo el área de semimucosas de las que están compuestos los labios, ya que se trata de un tejido mucho más delicado y sensible.

Es normal que con la llegada de frío y los vientos polares se pierda la humectación natural de los labios y tiendan a resecarse, asegura la dermatóloga Anabella de Chang.

¿Cómo protegerlos?

Protección en barra: existen protectores solares en barra que son específicos para el cuidado de los labios. Los protegen de la radiación ultravioleta y provee los vehículos humectantes e hidratantes para esa área.

Humectación: las cremas, los bálsamos o las ceras humectantes labiales ayudan a mantener un equilibrio adecuado en esta zona.

Hidratación: El consumo abundante de líquidos es requerido para conservar la hidratación corporal, en general.

Tu mejor aliado

Las bajas temperaturas y los fuertes vientos afectan la hidratación y elasticidad de la piel; pero ello es importante que te mantengas preparada y sobre todo, no te apartes del mejor aliado de la piel: el bloqueador UV.

"El bloqueador solar debe ser nuestro amigo inseparable. Y lo debemos aplicar cada 2 o 3 horas para protegernos de la luz ultravioleta", explica De Chang.

¡Cuidate! 

La limpieza de la piel del rostro es importante para su cuidado; utiliza Syndet y agua miscelar

Humectación: Prefiere jabones sin antibacteriales, ya que son muy fuertes para la piel; evita los baños con agua muy caliente y utiliza una humectante en todo el cuerpo.

Protección: aplica el bloqueador solar cada dos o tres horas para mantener tu piel protegida de la contaminación y radiación UV.

Rayos ultravioleta

Los rayos ultravioleta son una radiación electromagnética a cortas distancias que está presente tanto en los rayos del sol, como en lámparas, cámaras de luz, pantallas, entre otros.

¿Cómo se clasifican?

Según la sociedad americana contra el cáncer de piel, hay tres tipo principales de rayos UV:

1. Los rayos UVA envejecen a las células de la piel y pueden dañar el ADN de sus células. Estos rayos están asociados al daño de la piel a largo plazo tal como las arrugas.
2. Los rayos UVB tienen un poco más de energía que los rayos UVA. Afectan directamente al ADN de las células de la piel, y son los principales causantes de quemaduras de sol.
3. Los rayos UVC tienen más energía que otros tipos de rayos UV, pero no penetran nuestra atmósfera y no están en la luz solar.