El uso de la leña como fuente de energía es uno de los más utilizados en las áreas rurales del país y también resulta uno de los más dañinos para la salud.
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Esta fue la motivación principal para que Diego Alejandro Quan Reyes comenzara a trabajar en el proyecto de fabricar una estufa eficiente, mientras estudiaba Ingeniería en Sistemas Energéticos, en el Instituto de Recursos Energéticos de la Universidad Galileo.
“Estamos en un momento de la humanidad en que el reto tecnológico y cultural más grande de nuestra civilización es cambiar nuestra matriz tecnológica y nuestra cultura de consumo”, expresa el joven entusiasta.
“El elemento material más importante de esta lucha es la energía. Actualmente, la matriz energética del mundo se basa en combustibles fósiles que, si bien nos han permitido el desarrollo tecnológico y científico que ahora vemos, debe cambiar”, agrega.
En Ingeniería en Sistemas Energéticos se estudian todos los sistemas energéticos, renovables y no renovables.
El proyecto
La dinámica de una familia rural gira en torno a la cocina. Durante la cena o almuerzo es cuando se reúnen y conviven. “Es un elemento muy fuerte culturalmente, así que tiene potencial para hacer cambios y mejorar. Me tomé la tarea de crear una estufa que utiliza fuego limpio”, dice Diego.
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Según el experto, el único gas que es absolutamente limpio al momento de quemarse es el hidrógeno. El propano, el metano o cualquier otro gas orgánico genera CO2 y un poco de monóxido.
En un artículo de prensa conoció la comunidad 31 de Mayo, cerca de Ixcán. Después de haber diseñado el funcionamiento de una estufa eficiente, Diego partició en el certamen Greenovators y ganó US$10 mil. Con ese financiamiento fabricó tres prototipos y los colocó en la comunidad.
“Están instalados tres prototipos funcionales en la comunidad. Dos están interconectados a una microrred alimentada con una microcentral hidroeléctrica, y uno aislado con páneles solares y baterías”, comenta.
“Mi objetivo a futuro cercano es seguir estudiando y aplicar a una beca para estudiar ingeniería mecánica, de preferencia en el Massachusetts Institute Of Technology. Necesito fortalecer mis conocimientos técnicos en transferencia de calor, por ejemplo. Me daría muchas herramientas para mejorar el proyecto y que se logre fabricar de manera industrial”, añade.
Detalles del invento
Las dimensiones de la estufa son de 120 cm x 40 cm x 40 cm.
Se compone de una celda electrolizadora (donde ocurre la reacción de la electrólisis y el gas generado de una mezcla de hidrógeno y oxígeno), un reservorio (tanque de acero inoxidable herméticamente sellado con una capacidad de tres galones de agua mezclada con NaOH), un burbujador (una de sus funciones es limpiar el gas de posible electrolitos arrastrados), un arresta-llamas, un quemador y una estructura metálica (donde se coloca todo el sistema).
“Tuve que diseñar todo porque no había productos con las características que necesitaba”, comenta.
