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El Galaxy Note 7 fue lanzado en agosto. Su destino, según Samsung, era volverlo no solo su celular insignia, sino también la competencia directa para el iPhone 7 (lanzado unas semanas más tarde).
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Sin embargo, luego de diversas explosiones a causa de un defecto en la batería, la compañía decidió reemplazar los modelos existentes. Pero el problema no se solucionó. Los Galaxy Note 7 continuaron estallando en todo el mundo.
Finalmente, Samsung tomó una decisión dura: detener la venta y fabricación de este celular. Esto además de pedirle a los usuarios que lo regresaran a la brevedad.
Pero a pesar de esto, todavía hay personas que no lo han devuelto y continúan usándolo. Por ello, se han tenido que tomar medidas más exigentes en cuanto a la seguridad en vuelos.
El Galaxy Note 7 vetado de vuelos en todo el mundo
El pasado septiembre, la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés), ya había lanzado una advertencia. Fue publicada una nota en donde recomendaban a los pasajeros que no viajaran con un Galaxy Note 7 encendido. Y que, bajo ninguna circunstancia, lo cargaran durante el vuelo.
Pero ahora ya no es una sugerencia. Se ha prohibido de manera formal viajar con estos celulares, y violar dicha prohibición podría acarrear una multe de alrededor de 180 mil dólares. Si bien esto es en Estados Unidos, el mundo entero está implementando medidas similares.
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Un ejemplo es México, en donde la aerolínea “Volaris” ha dado aviso sobre dicha prohibición a sus usuarios.
El Note 7 que explotó en un avión
Estas medidas no llegan sin antecedentes que las respalden. Hace unas semanas, un Galaxy Note 7 reemplazado estalló dentro de un avión en estadounidense que iba de Louisville, Kentucky, a Baltimore, Maryland.
Por fortuna, el avión aún no despegaba y no se reportaron heridos. Sin embargo, el Galaxy Note 7 le prendió fuego a la alfombra del avión, lo que provocó que este fuera evacuado de emergencia.
