Opinión

Usuarios autoproductores de energía eléctrica

“Una razón importante para ser un autoproductor es la conciencia con el medioambiente”.

Por: José Rafael Argueta Monterroso, Director en la Comisión Nacional de Energía Eléctrica

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En 2008 la Comisión Nacional de Energía Eléctrica emitió la Norma Técnica para la Conexión, Operación, Control y Comercialización de la Generación Distribuida Renovable (NTGDR) y Usuarios Autoproductores con Excedentes de Energía. Esta norma permite que los usuarios de las distribuidoras puedan generar su propia energía eléctrica en sus casas. Los paneles solares fotovoltaicos son la principal fuente de generación para los usuarios residenciales porque son los que más fácilmente se adaptan con la arquitectura de las viviendas unifamiliares prevalecientes en Guatemala, ya que pueden instalarse sobre los techos y ocupan espacios relativamente pequeños. Otra cosa que hay que tener en cuenta son los altos niveles de radiación solar en una buena parte del territorio nacional, lo cual hace que se pueda generar cantidades aceptables de energía eléctrica.

El gran aporte de la norma (NTGDR) para los usuarios autoproductores es la posibilidad de seguir conectados a la red de distribución, ya que, cuando los paneles solares no funcionan por falta de luz solar, los usuarios pueden seguir consumiendo normalmente, sin interrumpir en ningún momento su suministro. ¿Cómo se logra esto? Al usuario autoproductor se le instala un tipo de medidor especial (bidireccional) que registra lo que se consume, pero también registra la energía que se entrega en el periodo de un mes.

“Una razón importante para ser un autoproductor es la conciencia con el medioambiente”.

Con estas dos lecturas se calcula el consumo neto de la energía, es decir se establece la diferencia entre la entrega y el consumo de energía eléctrica. Este proceso representa una gran ventaja para el usuario porque puede generar energía al sistema en las horas de luz y consumirla en las horas de la noche, que, además, es cuando más se utiliza por el hecho de que está toda la familia en casa realizando actividades de alto consumo, como la iluminación, entretenimiento (televisión y computadoras), preparación de alimentos, etc.

En 2008, cuando se emitió la norma, los paneles fotovoltaicos eran una tecnología muy cara; por lo tanto, la inversión requerida para que un usuario pudiera convertirse en autoproductor era alta. Con el paso del tiempo el costo se ha reducido fuertemente, alrededor del 80 por ciento en la última década de acuerdo a publicaciones especializadas, por lo que ahora equivale a una quinta parte de lo que costaba hace 10 años. Aun así se requiere de una inversión inicial, la cual se podría recuperar en alrededor de unos 5 años; sin embargo, tenga en cuenta que la instalación de los paneles tiene una vida útil que puede superar los 20 años, con solamente una pequeña reducción de capacidad, por lo que después de recuperada la inversión se tendrán muchos años de generación de energía de manera gratuita o a cero costo.

La pregunta importante para el usuario es: ¿Cuánto se reduce la factura de energía eléctrica? Aunque no hay respuesta única porque eso depende del tamaño de la instalación de los paneles y de los hábitos de consumo, una aproximación podría ser del 70% al 90% de lo que paga actualmente en su factura.

Para lograr esto, su instalación debería ser capaz de generar energía de manera cercana a lo que consume, pero hay que tener en cuenta que, a mayores consumos, la instalación de paneles será más grande y puede no tener el espacio físico necesario en su techo.

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Una razón importante para ser un autoproductor es la conciencia con el medioambiente. Cuando usted genera con paneles solares, contribuye a disminuir los gases de efecto invernadero, ya que desplaza energía que, de otra manera, por lo menos en alguna proporción, se estaría generando con combustibles fósiles (carbón o petróleo).

En esta época de confinamiento en los hogares, la práctica ha demostrado que hay un aumento de consumo en nuestras residencias. Pasamos más horas con las luces encendidas, se abre la refrigeradora con mayor frecuencia, las computadoras y los dispositivos de interconexión a la red son más demandados derivado del trabajo en casa o por la escuela virtual. Estas son actividades que seguramente formarán parte de la “nueva normalidad”, por lo que instalar paneles solares puede ser una buena opción que puede resultar en un ahorro significativo en el largo plazo.

Para resolver más dudas al respecto, consulte la página web www.cnee.gob.gt en la sección de autoproductores.

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