Foto. Publinews
Politólogo de Asíes @josecsa2
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La semana inició con una noticia que generó debate y polémica. Manuel Baldizón, el “precandidato presidencial” del partido Libertad Democrática Renovada –Líder–, presentó su renuncia como afiliado y como secretario general de ese partido político.
La decisión la tomó para no involucrar a Líder en problemas legales por una eventual campaña electoral anticipada, prohibida por la Ley Electoral y de Partidos Políticos (LEPP).Sin embargo, Baldizón refirió que continuará con participación política en actividades públicas y de proyección social, sin utilizar los colores ni el logo del partido.
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Desde mi perspectiva, es una acción completamente injustificable e ilegal. Baldizón a todas luces está utilizando artilugios para burlar la ley y continuar con su campaña anticipada.
El interés, sin duda, es tomar ventaja frente a sus posibles competidores, a través de reforzar y doblegar esfuerzos para posicionar su imagen, consolidar su plataforma mediática, así como fortalecer su presencia y figura pública. Es evidente que está cometiendo un fraude de ley. No es posible, en el caso de Baldizón, marcar una diferencia entre el partido y el “precandidato a la presidencia”.
Me atrevería a decir que son uno mismo. El partido nació, y se ha consolidado alrededor del liderazgo de él, mostrando el carácter personalista que adquieren muchos partidos en Guatemala.
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) deberá evaluar acciones legales para detener este tipo de estrategias. La cancha política-partidaria está abierta y los jugadores están cometiendo muchas infracciones. El TSE puede evaluar medidas drásticas para no inscribir a los candidatos que hayan realizado campaña anticipada con un partido, como funcionarios públicos o a título individual.
Por otro lado, los ciudadanos tenemos en nuestras manos la posibilidad de sancionar este tipo de actos. Una sanción efectiva puede ser por medio del voto. Es decir, que los ciudadanos les retiremos el respaldo político y electoral a los candidatos y a los partidos que a todas luces están buscando irrespetar y burlar la prohibición legal de realizar campaña anticipada.
La situación es compleja y aún quedan varias preguntas por responder. ¿Qué podemos esperar de los “precandidatos” y los partidos que infringen la ley? ¿Respetarán las leyes cuando estén en el gobierno? ¿O las infringirán de la misma manera en que lo están haciendo para poder llegar al poder? ¿Cuál es el papel de los afiliados y los dirigentes del partido Líder? ¿Estarán de acuerdo en que su “candidato” cometa un fraude de ley? ¿Qué opina usted de la actitud de Baldizón y del partido Líder?