El Ministerio de Salud y Asistencia Social espera el resultado de un análisis sobre un eventual arbitraje internacional por el contrato millonario de las vacunas rusas Spuntik, el cual sigue vigente.
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Guatemala busca rescindir del contrato vigente con Rusia para la compra de 4 millones de dosis de vacunas contra la Covid-19 de la marca Sputnik Light.
El titular de la cartera, Francisco Coma, en entrevista en A Primera Hora, informó que se trata de “un contrato complicado” y que la única viabilidad para frenarlo es a través de un sistema de arbitraje. Por ahora, indicó que se han hecho consultas con abogados internacionalistas para decidir si afrontarán esa vía legal.
“Se nos ofreció hace unos meses la vacuna Sputnik light sobre la cual no tenemos ninguna evidencia, ni de la que se pueden considerar por ahora un registro”, recordó Coma acerca de la readecuación del contrato.
El Gobierno aceptó renegoció con Rusia bajo el “compromiso” de adquirir 4 millones de dosis más. La condición era obtener el registro de emergencia por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), según anunció Coma en febrero pasado.
“Estamos tratando de buscarle la mejor salida, estamos esperando el análisis del arbitraje que se está haciendo para saber qué camino podemos darle”, reiteró esta mañana.
La compra original era de 16 millones de dosis anticovid, pero ambas partes pactaron que solo se cumpliera con la mitad de la entrega. Guatemala reclamó el retraso de las entregas que provocaron duras críticas contra el Gobierno de Alejandro Giammattei, incluso señalamientos de corrupción.
El Estado pagó Q614 millones por la totalidad del contrato, por lo que al menos Q307 millones podrían están de por medio en el segundo contrato.
Cuestionan contra de vacunas Sputnik
La organización Acción Ciudadana (AC) presentó una denuncia contra funcionarios del Ministerio de Salud señalando que hubo una serie de inconsistencias. La acusación indica que el contrato se acordó sin la revisión adecuada y desprotegiendo al Estado.
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El fraude, según AC, pudo darse en el proceso de la contratación ya que no existían garantías del uso correcto y oportuno de las vacunas, lo cual conllevó a que finalmente se perdieran.
Ministro admite escenario complejo
De acuerdo al ministro de Salud, enfrentar el proceso sobre el contrato es complejo, pero sostuvo que hay argumentos.
“No quiero ser negativo, pero creo que a nuestro favor debe ser el hecho de que es una vacuna que no tiene los soportes para poder hacer un registro, aunque sea de urgencia. Ese podría ser un argumento de peso y mecanismo de defensa”.
“Nos impactó negativamente que surgieron limitantes como los viajes al extranjero y una percepción que se genera de boca en boca. Por lo tanto, es un tema complicado de evaluar a futuros porque si las condiciones siguen siendo las mismas sí podría ser un problema”, añadió.