El jefe de la SAT, Marco Livio Díaz, anunció otras formas de fiscalización a los contribuyentes debido a que en sectores productivos que facturan a otras actividades emiten facturas sin Número de Identificación Tributaria (NIT), lo cual no es normal.
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Díaz anunció que le presentó al directorio de la SAT reformas al reglamento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y al Código Tributario para exigirle a los comercios emitir facturas con NIT o con el código del Documento de Identificación Personal (DPI) y en caso de extranjeros con el número de pasaporte.
De acuerdo con el superintendente, entre cinco sectores productos se han facturado alrededor de Q15 mil millones al consumidor final, lo cual es inusual, ya que esos sectores venden a intermediarios, que en su mayoría utilizan los documentos fiscales para obtener el crédito tributario.
“No vemos normal en la SAT que grandes comercios estén facturando al consumidor final, ya que rompe la cadena de control”.
Los sectores donde han visto esa mala práctica son en agricultura, comercio, inmobiliarias, industria y suministro de electricidad, gas y agua.
Por ejemplo, el superintendente mencionó que hay venta de casas al consumidor final, lo cual es una transacción difícil de que sea cierta.
Monitoreo de operaciones desde la SAT
Los estudios de la SAT reflejaron que al no pedir una factura con NIT se pierde la cadena de control, por lo que hizo un llamado a los comercios a emitir los documentos fiscales con el NIT, ya que sin ese dato se genera la evasión no solo del IVA, sino del Impuesto sobre la Renta y del Impuesto de Solidaridad.
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Díaz resaltó que al emitir una factura con NIT existe una garantía de la compra. Un soporte para reclamar el crédito fiscal y se fomenta la formalidad.
“Se anuncian las acciones para que voluntariamente mejoren su comportamiento. Pedimos que en los comercios identifiquen a los clientes, ya que sin ese dato se fomenta la competencia desleal”, resaltó el superintendente.
“Un reclamo del sector privado es que se amplíe la base tributaria; sin embargo, si ellos mismos incentivan la facturación al consumidor final se permite la informalidad. Hay facturación arriba de Q25 mil, lo cual no se justifica”, Marco Livio Díaz, jefe de la SAT
