Los médicos del Hospital Roosevelt rechazaron que las autoridades del Ministerio de Salud no les garanticen la inyección de refuerzo contra la Covid-19 con las vacunas necesarias.
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Los representantes de la Junta Directiva de esa hospital expresaron su descontento ante la negativa de las autoridades de Salud.
Uno de los representantes explicó que la petición se basa en la recomendación de la Comisión Nacional de Inmunizaciones que indicó que la dosis de refuerzo para aquellos que recibieron anteriormente la vacuna AztraZeneca, debe ser de Pfizer o Moderna.
Casi el 60% del personal en Hospital Roosevelt recibió la dosis de AztraZeneca cuando se puso en marcha la inmunización en marzo del año pasado.
“Nos hemos dado cuenta que a los médicos y enfermeras del hospital Roosevelt se nos ha estado colocando una vacuna, que si bien se puede administrar, no es la mejor opción para la tercera dosis”, indicó uno de los médicos.
No administrar las inyecciones específicas también podría afectar a los pacientes inmunosuprimidos, enfatizó.
Piden apoyo al ministro de Salud
La vacunación contra la Covid-19 de los trabajadores se detuvo el martes de la semana pasada, ya que según los médicos expusieron la inconformidad al ministro de Salud, Francisco Coma.
“Ese día nos hizo suspender la vacunación porque nos dijo que el jueves y viernes de la semana pasada iniciaría la vacunación con la vacuna recomendada”, indicó el representante de la Junta de médicos.
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No obstante, a finales de la semana pasada en el centro de vacunación del parque Erick Barrondo se seguían inyectando dosis de AztraZeneca.
“¿Por qué no se la ha dado la misma importancia al personal de salud pública?”, cuestionó el médico al hacer referencia que a diferencia de los trabajadores del Instituto de Seguridad Social (IGSS) sí se les está administrando las vacunas sugeridas.
“Lo que queremos hacer ver al ministro es que se tome la conciencia para el personal de salud pública porque estamos expuestos”, afirmó.
Vacunación de refuerzo
Actualmente la vacunación de una dosis de refuerzo es priorizada para personal de primera línea y del ámbito sanitario tanto pública como privada.
En esta fase también se incluye en este grupo al personal de los equipos de vacunación.
Otro segmento priorizado son las personas inmunodeprimidas de moderada a grave.
