Tres presos fueron descubiertos por la Policía de Ecuador cuando intentaban ingresar una gran cantidad de armas, municiones y explosivos a la cárcel del Litoral, en Guayaquil, donde hace meses se registró la peor masacre carcelaria en la historia de ese país.
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Los reclusos habían cortado parte de una reja de la prisión que da hacia una calle que conecta con la cárcel para mujeres, y pretendían recoger sacos llenos con pistolas, fusiles, cerca de 5 mil municiones y explosivos de entre los arbustos.
“No es que salieron a la parte externa totalmente, (pero) están en una zona restringida para ellos”, señaló en rueda de prensa Marco Villegas, coordinador policial del Sistema Penitenciario.
Los reclusos fueron trasladados a una audiencia de formulación de cargos por pretender ingresar material prohibido a una cárcel.
Cárceles violentas
Villegas agregó que el hallazgo, hecho durante madrugada del viernes, da cuenta de que “día a día” hay “intentos de ingresar armamento, municiones y otros elementos explosivos a la penitenciaría”.
En imágenes difundidas por la policía, se observa las armas envueltas en plástico y decenas de explosivos.
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En septiembre pasado, en esa misma cárcel, un enfrentamiento armado entre miembros de bandas rivales con vínculos con el narcotráfico dejó 119 muertos, convirtiéndose en la mayor masacre de la historia carcelaria de Ecuador y una de las peores de la región.
El jueves, el ente encargado de administrar las prisiones reportó disparos en el centro carcelario, que dejaron un agente de seguridad penitenciaria herido. “Su condición de salud es estable”, precisó el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (SNAI).
Las revueltas carcelarias en todo Ecuador dejan más de 250 reos muertos en lo que va del año. En febrero, fallecieron 79 reclusos en amotinamientos simultáneos en cuatro centros penitenciarios.
*Con información de AFP