El ministro de Salud y Bienestar de la república de China, Taiwán, doctor Shih-chung Chen, realizó una reseña sobre el tratamiento que han llevado a cabo desde los inicios de la pandemia en Wuhan, China.
PUBLICIDAD
“Debido a su proximidad con China, se esperaba que Taiwán fuera uno de los países más gravemente afectados por la pandemia”, asegura el experto.
No obstante, agrega que gracias a la experiencia de Taiwán en la lucha contra el brote del SARS de 2003, no se ignoraron las alarmas y se recopilaron los datos oficiales y no oficiales según iban evolucionando para formar un panorama de la enfermedad emergente que implicada un alcance y una gravedad mayores de lo que sugería la percepción pública mundial.
Contención del Covid-19
Taiwán ha contenido el Covid-19 desde el comienzo de la pandemia habiendo conseguido un récord de 253 días sin ningún caso de transmisión local entre abril y diciembre de 2020.
“Después de lidiar con el SARS, Taiwán estableció una red nacional de atención médica para enfermedades infecciosas, dirigida y supervisada por expertos en enfermedades infecciosas en seis regiones”, se añade.
En dicha red están incluidos más de 100 hospitales de aislamiento, y las 22 municipalidades especiales, condados y ciudades han designado uno de sus hospitales de respuesta principal.
Por otro lado, también se menciona que en ningún momento Taiwán ha restringido el derecho de las personas a la libertad de expresión, reunión o participación en la vida pública.
“Aunque la COVID-19 ha golpeado duramente a todos los países, su impacto ha sido más severo entre las comunidades ya vulnerables y de alto riesgo, así como entre las que carecen de servicios de atención médica de calidad, y las que no pueden manejar las consecuencias adversas de las medidas de contención antipandémica”, menciona.
Instan a la OMS
Por lo antes mencionado, Taiwán insta a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a las partes relacionadas a reconocer las contribuciones que desde hace tiempo realiza este nación a la comunidad internacional en las áreas de salud pública, prevención de enfermedades y el derecho humano a la salud, y a incluir a Taiwán en la OMS y en sus reuniones, mecanismos y actividades.
“Taiwán seguirá trabajando con el resto del mundo para garantizar que todos disfruten del derecho humano fundamental a la salud estipulado en la Constitución de la OMS. Haciéndonos eco del lema de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030 de las Naciones Unidas, nadie debe quedarse atrás”, comenta.
Asimismo, se menciona que Taiwán juega un papel indispensable en vigilancia global y los sistemas de alerta temprana que detectan la amenaza de enfermedades infecciosas emergentes, y “el llamado “Modelo de Taiwán” ha demostrado ser consistentemente capaz de contener a la COVID-19”, apunta.
Finalmente, se añade lo siguiente:
“Taiwán seguirá trabajando con el resto del mundo para garantizar que todos disfruten del derecho humano fundamental a la salud estipulado en la Constitución de la OMS. Haciéndonos eco del lema de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030 de las Naciones Unidas, nadie debe quedarse atrás”.