En la práctica, el coronavirus afecta como cualquier enfermedad respiratoria convencional.
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Sin embargo, el hecho de que no exista tratamiento ni vacuna enciende las alarmas de países que no quieren que el contagio termine saturando los sistemas de salud y exponiendo a los grupos de riesgo que ya bastante tienen con la influenza y el sincicial.
Responsabilidad
Por eso, el principal llamado es a ser responsables. A medida que pasen las semanas, la ola de nuevos casos dificultará el seguimiento de las autoridades para contener el brote y, según los expertos, ahí serán las personas y sus cuidados los que hagan la diferencia en disminuir la curva de nuevos casos.
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El médico Carlos Pérez, infectólogo y decano de la Facultad de Medicina y Ciencia en la Universidad San Sebastián, en Chile, expresa que hay una premisa que todos deben seguir en invierno: “Quienes sean sintomáticos respiratorios, especialmente con cuadros febriles, no deben ir a trabajar ni estudiar. Así de simple”.
Cualquier persona de 50 años o menos tiene posibilidades extraordinariamente bajas de morir si contrae el virus, pero, lo esencial, según los médicos, es que si dicho individuo no toma sus precauciones, podría infectar a un mayor de 80 años, por quien la letalidad crece al 15%.
