Volver a su hábitat natural es lo mejor que puede pasarle a especies animales que ya sea por cuenta propia o por acción humana han cambiado su entorno de vida.
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En el transcurso de la última semana el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) ha logrado el rescate de diversos animales y ha podido liberarlos del cautiverio.
Algunos de ellos presentan heridas o necesitan algún tipo de cuidado previo a ser puestos en libertad.
Armadillo perdido
En el departamento de San Marcos, la Dirección Regional del Altiplano Occidental del Conap rescató un armadillo.
Dicho ejemplar de nombre científico Dasypus novemcinctus se encontraba en buenas condiciones de salud.
Con el apoyo de la Municipalidad del Ayutla se logró su captura y tras un examen clínico fue puesto en observación.
El Conap está a cargo de su alimentación y posteriormente será liberado en un lugar adecuado para asegurar la conservación de la especie.
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Un zorro gris y temeroso
Una persona decidió entregar voluntariamente un ejemplar de zorro gris que se encontraba extraviado.
Según dijo lo encontró en un terreno de su propiedad ubicado en el barrio Santa María, del municipio de Poptún, en Petén.
El zorro es una especie de mamífero carnívoro de la familia Canidae y fue recibido por técnicos del Conap para su cuidado.
También aves
Una llamada dio el aviso al personal de la oficina de la Dirección Regional de Conap oriente para otro rescate.
Por tal razón dieron apoyo para la identificación y resguardo de tres especímenes de búho virginianus.
Estos se encontraban en un sector de la aldea Agua Caliente del municipio de San Antonio La Paz, en El Progreso.
Los ejemplares fueron evaluados para determinar su estado de salud y posteriormente regresaron a su hábitat.
¿Especies marinas? Sí.
El pasado 19 de agosto el director regional de Conap Costa Sur recibió una llamada de varias personas.
Se trataba de comunitarios de Tulate, un sector de la playa de San Andrés Villa Seca, en Retalhuleu. Relataron que a orillas de la playa se encontraba varado un espécimen de fauna marina.
Inmediatamente y en conjunto con el delegado de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), expertos acudieron al lugar indicado para desencallar el espécimen.
Se trataba de nombre común Rorcual Jorobado y de nombre científico “Megaptera novaeangliae”.
Posteriormente el personal de Conap y Conred realizaron varios recorridos y monitoreos por el lugar para verificar que el ballenato no volviera a encallar en los alrededores.
