Noticias

Si queremos salvar a la humanidad, tenemos que comenzar por las abejas

El planeta está atravesando la peor crisis y una de las más fuertes es la extinción de las diferentes especies animales.

Entre estas especies en riesgo están las abejas, por lo que el 20 de mayo se conmemora el Día mundial de las abejas, que surge  con el objetivo de crear conciencia de la importancia que tienen para nosotros.

La actividad humana lleva años costándole la existencia a uno de sus más importantes aliados: la abeja.

Una crisis que debe resolverse pronto, pues, irónicamente, de ello depende también gran parte de la existencia del ser humano.

Recomendados

“El destino de la humanidad y las abejas está íntimamente entrelazado”, explica Dave Goulson, profesor de Biología en la Universidad de Sussex y especialista en el tema.

Además le dice a Publinews Internacional: “No podemos alimentar a los siete mil millones de personas del mundo (que pronto serán más que 10 mil millones) sin la polinización que proporcionan las abejas y otros insectos como las moscas, las polillas y los escarabajos.

Y asegura: "Aproximadamente la tercera parte de un alimento, incluyendo la mayoría de las verduras y frutas que son más nutritivas para comer, dependen de los polinizadores”.

Las abejas no son los únicos polinizadores en el planeta (también cuentan las mariposas, los murciélagos y los colibríes, por ejemplo), pero son las más populares y, por lo tanto, cruciales.

“Es importante recordar que existen muchas especies de abejas (aproximadamente conocemos 20 mil) y todas son importantes polinizadoras. Hay pruebas claras de que muchas especies de abejas silvestres están en declive y algunas, como el abejorro de Franklin, se han extinto. Nuestras abejas silvestres están en problemas, lo que debería ser motivo de gran preocupación”, agrega.

El uso de pesticidas, el cambio de uso de suelo o la destrucción de sus hábitats naturales (todas, actividades humanas) son su principal amenaza, motivo por el cual la Organización de las Naciones Unidas designó el 20 de mayo como el Día mundial de la abeja.

También es importante recordar otras amenazas como “la pérdida de hábitats ricos en flores, la propagación de parásitos no nativos y los efectos crecientes del cambio climático”, añade Goulson.

Se termina el tiempo para salvar a las abejas

“El tiempo ya se ha acabado para algunas especies”, advierte Goulson. “A nivel mundial, estamos en medio de la sexta extinción masiva, con tal vez hasta 200 especies de animales y plantas que se extinguen cada día. Debemos actuar ahora si queremos evitar la pérdida de gran parte de la maravillosa biodiversidad de nuestro planeta”, finaliza.

“Tenemos buenas razones para estar preocupados: El 80% de las especies de plantas requiere que las abejas las polinicen. Sin abejas, no hay polinización, y algunas de nuestras frutas y verduras favoritas podrían desaparecer de la faz de la Tierra ”, explica Guillermo Fernández, de la organización Honeybee Conservancy.

“Ya lo vemos en algunas partes de China, donde los pesticidas mataron las colonias de abejas y obligaron a los humanos a polinizar sus cultivos a mano”, señala Fernández.

“Casi un tercio de los cultivos de los Estados Unidos depende de las abejas para la polinización, pero casi una cuarta parte de las abejas comerciales de la nación ha desaparecido en los últimos años. Y, de las más de cuatro mil especies de abejas nativas en América del Norte, casi una de cada cuatro está en mayor riesgo de extinción”.

Entrevista

Mark J. F. Brown
Profesor de Royal Holloway, Universidad de Londres
Director de PoshBee

Cuéntanos sobre PoshBee, ¿cómo ayuda a la conservación de las abejas?

Es un proyecto financiado por el programa de investigación e innovación “Horizon 2020” de la Unión Europea, que involucra a 43 socios en 12 países, e incluye no solo a científicos, sino también a agricultores y apicultores.

Nuestro objetivo es comprender las amenazas que representan para las abejas los agroquímicos, los patógenos y las enfermedades, y la falta de nutrición, y desarrollar métodos para reducir estas amenazas que resultan en poblaciones de abejas sanas en toda Europa.

Lo que aprendemos también podría ayudar a las abejas en todo el mundo.

¿Cómo podemos ayudar a salvar a las abejas?

Plantando flores amigables para las abejas en los jardines, presionando a las autoridades locales para que hagan que las áreas comunes sean amigables con la biodiversidad y apoyando la agricultura que abarca la naturaleza.

¿Es posible que las abejas se extingan?

Si bien la extinción de las abejas es poco probable, definitivamente queremos detener y revertir las disminuciones que conocemos y las que no sabemos.

Para hacer esto, podemos hacer que nuestros paisajes sean más acogedores al aumentar el número de plantas con flores para proporcionarles alimentos, asegurarnos de que tengan sitios para anidar e hibernar durante el invierno (o, en climas más cálidos, durante los veranos secos), y reducir la cantidad de insecticidas que utilizamos.

Existen 20 mil tipos diferentes de abejas en el mundo, y para la mayoría de estas no tenemos idea de si están bien o en peligro de extinción.

Sabemos que muchos abejorros están en declive en todo el mundo, desde Europa hasta América del Norte y Asia. En Europa, las estimaciones de cuántas abejas diferentes están amenazadas varían del 5% al 60%.

Nuestra incertidumbre es alta porque para la mayoría de estas abejas no sabemos lo suficiente sobre el tamaño, el crecimiento o la disminución de sus poblaciones para saber cómo se encuentran.

En consecuencia, es difícil decir si estamos en crisis, pero como los insectos en general han disminuido en aproximadamente un 75% desde la década de 1980, parece probable que las abejas sean parte del problema.

5 FORMAS DE AGRADECER A LOS POLINIZADORES

  1. Dales a las abejas el alimento que les gusta cultivando plantas nativas en tu jardín.
  2. Plantar un conjunto diverso de plantas nativas que florecen en diferentes épocas del año puede hacer una gran diferencia para los polinizadores.
  3. Compra miel cruda de los agricultores locales.
  4. Muchos pequeños agricultores locales y comunidades forestales mantienen prácticas sostenibles de apicultura.
  5. Puedes prestar apoyo comprando miel cruda, cera de abeja u otros productos de abeja directamente de ellos.
  6. Hacer una fuente de agua para abejas.
  7. Dejar un tazón de agua limpia y poco profunda, con piedras o palos para que las abejas no se ahoguen, es una buena manera de darles un lugar de descanso y un refresco necesario.
  8. Evita los pesticidas, fungicidas o herbicidas en los jardines.
  9. Trata de encontrar soluciones naturales para las plagas de las plantas en tu jardín.
  10. Aprende más sobre las abejas y vence tus miedos.
  11. Las abejas no son generalmente peligrosas. No todas las abejas pican y las que lo hacen, lo hacen por una razón.
  12. El aguijón y el enjambre son mecanismos de autodefensa. No atacan a los humanos intencionalmente.

Fuente: fao.org

Tags

Lo Último


Te recomendamos