La división en el partido oficial Frente de Convergencia Nacional-Nación (FCN-Nación) cada día se evidencia para apoyar temas del gobierno tal como se evidenció ayer cuando se intentaba avalar el endeudamiento para combatir la desnutrición infantil.
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La urgencia del Ministerio de Finanzas por aprobar ese crédito se debe a que vencerá el 22 de marzo; sin embargo, las dudas en la ejecución del préstamo ha hecho que varios diputados no estén de acuerdo.
El primer cambio que restó apoyo fue que el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) no fuera el ente ejecutor, sino que esté a cargo de la cartera de Salud Pública, en coordinación con la Sesan y el Mides.
Víctor Martínez, titular del Ministerio de Finanzas, comentó que el 75% son con destina específico y el resto se usará para el fortalecimiento ministerial, por eso se incluyeron a las otras entidades.
El funcionario agregó que el préstamo busca fortalecer seis áreas de salud en la parte de transformación cultural y prevención y dotaciones, como compra de filtros de agua y construcción de letrinas.
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Los ausentes
Javier Hernández, jefe de la bancada FCN-Nación, criticó que varios diputados no se presentaron a pesar de los acuerdos alcanzados la semana pasada.
“Los consensos los habíamos logrado con las enmiendas y hoy nos sorprende que una bancada esté con cero de asistencia”, resaltó Hernández.
Otros de los que no se presentaron fueron congresistas de la misma bancada oficial, Alianza Ciudadana y agrupaciones allegadas al oficialismo.
Distribución
- De acuerdo con Finanzas, US$46 millones del préstamos servirá para fortalecer el Ministerio de Salud.
- Otros US$10 millones para el cambio cultural entre la población y US$4 millones para la ejecución y evaluación.
- Además US$16 millones para la compra de insumos, US$7.5 millones para mediciones y US$15 millones para medir los resultados.
“Decisiones deben ser técnicas”, análisis de David Casasola, del CIEN
Dejan mucho que desear las decisiones de los diputados porque deben ser técnicas y no políticas. El atraso de la aprobación del préstamo solo impide que se echen a andar programas que ya están planificados. También el país no puede darse el lujo de estar pagando intereses por créditos que fueron aprobados pero que no se están ejecutando y debe ser prioridad la estructura de ejecución. La decisión de los diputados es porque muchos no se podrán reelegir y tampoco hay claridad de quien será el próximo presidente, y eso afecta principalmente el futuro del país porque no hay visión de largo plazo.
