Noticias

Eddy Villadeleón "Dos zorros nos cuidan"

Para esta edición de la Caravana del Zorro, Eddy Villadeleón asegura que tiene la bendición de dos “zorros”: Su padre, quien falleció en 1987, y ahora de su madre, quien el año pasado dejó de existir. Narró a Publinews algunas anécdotas de su peregrinar, como, por ejemplo, la ocasión en la que viajó solo porque no le dieron permiso de faltar al trabajo y cuando llegó a Esquipulas se encontró con su padre quien lo esperaba incondicionalmente. También menciona quién podría remplazarlo en el momento en que ya no esté.

El sonido de un motor de motocicleta llama la atención de quienes participarán en la presentación del plan operativo por la 58 edición de la Caravana del Zorro, es la Harley Davidson Sportster de 1200 caballos de fuerza de Eddy Villadeleón, “el Zorro Mayor”.

PUBLICIDAD

Mientras se quita el casco en el cual figura un zorro y deja sobre el asiento de cuero de su “máquina” el par de guantes que portaba, Villadeleón se acomoda una gorra conmemorativa de la caravana para participar en el evento y posterior a ello brindar una entrevista a Publinews.

De cerca…

Después de 57 años la caravana continúa cobrando auge. ¿Qué opina?

Es un orgullo y satisfacción tener esta responsabilidad, que fue una promesa que le hice a mi señor padre en el año 1987 cuando falleció. Se ha visto el incremento de participantes, los cuales este año podrían superar las 35 mil personas.

¿Cuándo participa por primera vez Eddy Villadeleón?

En 1970, tenía unos 23 años, recuerdo que mi papá me regaló una moto checoslovaca, era una CZ-125. Yo iba realizado en mi máquina porque le quité las loderas y la puse liviana, y solamente tenía un asiento.

Después de participar por 49 años, ¿alguna vez ha faltado?

PUBLICIDAD

En un año no me dieron permiso de faltar al trabajo, así que después de medio día empecé el recorrido, únicamente hice dos paradas y afortunadamente más personas se iban sumando. Llegué a Esquipulas a las 8 de la noche y cuando caminaba a la basílica, mi papá estaba en las gradas esperándome, fue un gran sentimiento porque no había teléfonos para comunicarnos, pero él sabía que yo iba a llegar.

Esta actividad significa mucho para su familia…

Este año tenemos a dos zorros más que nos dan la bendición, porque lamentablemente a nuestra madre la perdimos en junio del año pasado, ahora los viejos están juntos. Mi madre le brindaba un gran apoyo a mi padre, ella le ayudaba a entregar recuerdos a los participantes. Con mi papá, además de ser su hijo, fuimos grandes amigos, a veces me presentaba como su hermano menor. Me hace falta…

Todo un legado

¿Después de usted quién podría recibir este legado?

Mis hijas, porque mis hijos están en Estados Unidos. Hay una de ellas que le ha gustado el motociclismo y su esposo es endurista, ellos tienen un chamaquito de 8 años que le está prestando mucha atención. Este año no nos acompañarán, pero si a ella le interesa probablemente quede al frente con los amigos de la junta directiva.

Algunas personas critican el movimiento de motoristas. ¿Qué les puede decir?

Si alguien hace algo bueno, pocos lo van a reconocer, pero si hace algo malo, todo el mundo lo va a tachar; nosotros no somos la excepción y se debe a que algunas personas han dado el mal ejemplo y empañan el nombre de la caravana.

En ese sentido, la caravana organiza donativos. ¿Tienen alguno planificado?

Hemos apoyado con equipamiento para algunas escuelas en Esquipulas; sin embargo, en este año no recibimos solicitudes, es por ello que estamos coordinando el apoyo para un centro educativo en Petén.

¿Qué hace cuando llega a Esquipulas?

Al llegar al templo le doy gracias al Señor de Esquipulas y a las 18:00 horas inicia una misa en honor a la caravana. Posterior a ello nos retiramos a descansar al hotel y al día siguiente regresamos a la iglesia y colocamos veladoras.

PUBLICIDAD

Tags

Lo Último