Toma en cuenta estos consejos para cuidar tu moto y desplazarte por cualquier lugar sin inconvenientes. ¿Vas a la Caravana del zorro? Toma nota:
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- Presta atención al sistema eléctrico para evitar sorpresas
La humedad es el peor enemigo de todos los contactos eléctricos de tu motocicleta. Es por ello que es necesario que la mantengas cubierta si la estacionas a la intemperie. Por ningún motivo permitas que llegue el agua a los telecomandos. Un peligro común son los cables pelados, que pueden debilitar el sistema o hasta volverlo inservible. El sistema eléctrico de tu moto va más allá de la batería y los fusibles, ya que también abarca las luces, las bujías y el motor de partida.
- Recuerda las instrucciones
Es momento de que desempolves el manual de tu motocicleta. Léelo detenidamente para conocer con precisión cómo funciona tu máquina.
- La mejor técnica para frenar
Presionar de manera suave pero firme y al mismo tiempo ambos frenos es la mejor manera para detener la marcha sin perder el control.
- La suspensión es vital
El mal estado de las carreteras provoca un desgaste en los amortiguadores, es por ello que se recomienda mejorarlos o reemplazarlos. En las motos deportivas la suspensión es expuesta a duras condiciones.
- Consiéntela con limpieza
Cuando laves tu moto, hazlo a la sombra y utilizando agua, jabones especiales y esponjas. La mejor forma de llegar a los rincones más profundos será con un cepillo de dientes. Recuerda secarla.
- La sangre del corazón de tu compañera en la ruta
Los expertos aseguran que la vida útil del aceite de base mineral para moto está entre los mil y mil 500 kilómetros. Es preciso que cuando cambies el aceite también reemplaces el filtro.
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- Observa los detalles del mecanismo
Un posible desajuste en la cadena o el funcionamiento adecuado de los frenos los podrás ver con facilidad si observas con detenimiento tu máquina al limpiarla. Nunca olvides revisar el nivel de aceite.
- No pases por alto la tensión de la cadena
Cuando le des mantenimiento a la cadena debes procurar que quede bien engrasada y tensa. La tensión la puedes hacer tú mismo apretando los tornillos que están al final del basculante, lo que aleja la rueda hacia atrás, pero si lo ves complicado, será mejor que acudas a un mecánico. Si la cadena no está tensa se puede salir y eso te dejará expuesto a un accidente, pero también corre el riesgo de romperse si está demasiado tensa.
- El casco puede salvarte la vida
La mejor elección de casco que puedes hacer es aquel que te cubra el rostro por completo. Otra opción es el que protege tres cuartos de la cara y el que da protección a la mitad de la cabeza.
- Es importante calibrar los dos neumáticos
La recomendación de algunos fabricantes es que la llanta delantera esté inflada con 28 libras y la trasera con 30, toda vez viaje solo un pasajero. Nunca te expongas a viajar con llantas lisas.