El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, intentaba este domingo calmar las preocupaciones en su país tras el anuncio de la retirada de soldados estadounidenses de Siria, y afirmó que Israel continuaría luchando contra la presencia militar de Irán.
El presidente estadounidense Donald Trump anunció el miércoles la retirada total de las tropas estadounidenses de Siria, considerando haber alcanzado su objetivo de "vencer" al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en este país.
I just had a long and productive call with President @RT_Erdogan of Turkey. We discussed ISIS, our mutual involvement in Syria, & the slow & highly coordinated pullout of U.S. troops from the area. After many years they are coming home. We also discussed heavily expanded Trade.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) December 23, 2018
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Para Israel, la presencia estadounidense en territorio sirio constituía un escudo contra la implantación iraní y un contrapeso a la influencia rusa.
Rusia, Irán y el movimiento libanés chiita Hezbolá son aliados del régimen de Bashar al Asad en la guerra que devasta a Siria desde 2011.
"La decisión de retirar los 2.000 soldados estadounidenses de Siria no cambiará la coherencia de nuestra política", afirmó este domingo Netanyahu al comienzo del consejo de ministros semanal.
"Vamos a continuar a actuar contra el intento de Irán de establecer una presencia militar en Siria y, si es necesario, vamos a extender más allá nuestras acciones", añadió, y precisó que quería "calmar a aquellos que están preocupados".
Además aseguró que la cooperación con Estados Unidos continúa mantenida "plenamente".
Según medios israelíes, Netanyahu podría además discutir la cuestión siria con el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, en Brasil, al margen de la investidura del presidente Jair Bolsonaro el 1 de enero. La Oficina del primer ministro no confirmó en cambio esta información.