El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) determinó que no es necesario que el presidente Otto Pérez Molina continúe internado en el Centro Médico Militar.
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El exmandatario, señalado en diferentes casos de corrupción, ingresó en agosto pasado al centro asistencial, tras presentar complicaciones en su salud, relacionadas con un padecimiento cardiaco que sufre.
El privado de libertad fue sometido a una cirugía, en la cual se le hizo el cambio del cardiodesfibrilador que tiene implantado en el corazón.
El Juzgado de Mayor Riesgo B, a cargo de Miguel Ángel Gálvez, ordenó la semana pasada que se le practicara una evaluación por parte de expertos del Inacif, para determinar su estado de salud tras someterse a ese procedimiento médico.
Y este viernes la entidad forense remitió a la judicatura el informe con los resultados del examen que se le realizó al exgobernante.
El documento señala que Pérez se encuentra estable y no necesita recibir tratamiento médico en el hospital en donde está internado. En ese sentido, podría regresar a la cárcel Mariscal Zavala, en donde guarda prisión preventiva.
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El informe agrega que el dispositivo que se le implantó recientemente en el corazón al recluso funciona en un “cien por ciento”.
Asimismo, recomienda al expresidente que no se someta a esfuerzos físicos moderados de manera voluntaria o involuntaria, que puedan ponerlo en una condición de riesgo de muerte y evitar así complicaciones como la que en agosto lo llevó a ser intervenido quirúrgicamente.
Espera juicio
Pérez Molina está señalado en los casos Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ), Cooptación del Estado y La Línea, por supuestos actos de corrupción. En este último proceso, ya fue enviado a juicio.
El Ministerio Público lo señala de dirigir, junto con la ex vicepresidenta Roxana Baldetti, quien también se encuentra en prisión, una organización delictiva dedicada a la defraudación aduanera.
* Con información de Emisoras Unidas.
