El tren tansportaba a 362 personas desde la localidad de Kapikule, en la frontera con Bulgaria, hacia Estambul, cuando descarrilaron seis vagones a la altura del pueblo de Sarilar.
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El viceprimer ministro turco, Recep Akdag, anunció este lunes por la mañana que 24 personas fallecieron en el accidente y que también había decenas de heridos.
Akdag agregó que las operaciones de rescate terminaron este lunes por la mañana.
Por su parte, la ministra de Sanidad, Ahmet Demirca, indicó que 318 heridos recibieron atención médica en hospitales tras el accidente, y que 124 aún seguían internados.
El Ministerio de Transportes explicó en un comunicado que el descarrilamiento se produjo por las abundantes lluvias que dañaron el estado de las vías. El tren parecía circular en una vía antigua, con un único sentido.
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El presidente turco, Recep Tayip Erdogan, que este lunes inicia su nuevo mandato, expresó sus condolencias a las víctimas y anunció una investigación sobre este "accidente trágico".
Se trata, además, del accidente ferroviario más mortífero en el país desde 2004, cuando el descarrilamiento de un tren en la provincia de Sakarya dejara 41 fallecidos.
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Otras 9 personas murieron en enero de 2008 luego de que un tren descarrilara por el estado defectuoso de las vías en la región de Kutaha, en el sur de Estambul.
*Con información de AFP