La directora ejecutiva del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Marlin Sierra, aseguró que al menos tres personas murieron en Nagarote (noroeste), Tipitapa (Managua), Masatepe (sur), en ataques armados contra las barricadas de manifestantes que protestaban contra el gobierno.
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Según el organismo, la ola de protestas y la represión oficial han dejado 161 muertos desde el pasado 18 de abril, cuando se inició el movimiento contra el presidente Daniel Ortega.

La represión se agudizó en medio del paro nacional, convocado por Alianza Nacional por la Justicia y la Democracia, que agrupa estudiantes, empresarios y sectores de la sociedad civil.
El paro de labores busca presionar a Ortega a cesar la represión y retomar el diálogo para buscar una salida a la crisis que vive el país.
La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) convocó para el viernes a la mesa de diálogo entre el gobierno y la oposición.
Según el párroco Juan López, en Nagarote, 42 kilómetros al noroeste de Managua, en medio del intenso fuego de fusiles y morteros artesanales, falleció Gilberto Urroz, quien estaba en una trinchera.
En Tipitapa, 20 kilómetros al norte de Managua, se produjeron fuertes enfrentamientos entre las turbas que, apoyadas por paramilitares, llegaron a desmantelar las barricadas instaladas por manifestantes.
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En medio de los enfrentamientos, centenares salieron a la calle sonando cazuelas, agitando pañuelos y gritando "que se vayan" (a los agresores).
La Asociación Nicaragüense pro Derechos Humanos (ANPDH) denunció que periodistas de los medios independientes, Canal 10 de televisión y Radio Corporación fueron agredidos en Nindirí (sur) por las turbas, dañando sus equipos de trabajo.
Las calles de la mayoría de ciudades lucen desoladas por el cierre de negocios que acataron el llamado a paro nacional.
*Con información de AFP