Los países insulares de Samoa, Tonga y Kiribati, en el océano Pacífico, fueron los primeros en dar la bienvenida al Año Nuevo con sus tradicionales danzas.
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Estos archipiélagos, cuya población combinada supera los 300.000 habitantes, escucharon las doce campanadas a las 10.00 horas y entraron así en el 1 de enero.
Una hora después, también Nueva Zelanda celebró el comienzo de 2018, mientras que en Australia centenares de personas se acercaron al puerto de Sydney para contemplar el gigantesco espectáculo de fuegos artificiales.
La Policía ha planificado bloquear con carros y camiones algunas calles de Sídney para evitar ataques terroristas con vehículos, como los ocurridos en los últimos años en países como España, Estados Unidos, Francia, Reino Unido o Suecia.
Cerca de 250 mil filipinos asistieron a la procesión del Nazareno Negro en Manila antes de la Nochevieja, que suelen celebrar con gran cantidad de petardos, tracas y cohetes.
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Aunque los budistas birmanos, camboyanos, laosianos, tailandeses y vietnamitas celebran su Año Nuevo en fechas distintas, también acogen a las celebraciones de la Nochevieja del calendario gregoriano.
