El superintendente del distrito educativo más grande de Iowa, Estados Unidos, y su esposa recibieron en su casa a una inmigrante guatemalteca de 17 años cuyos padres fueron sacados de Estados Unidos porque vivían sin permiso en el país.
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En octubre, Jennifer Galdames estaba a un año y medio de terminar la secundaria cuando su padrastro y su madre fueron detenidos mientras llevaban a la escuela a otra de sus hijas.
Según el periódico Des Moines Register, el padrastro de Jennifer estuvo detenido previo a ser deportado a México. Mientras que a la madre de la adolescente le permitieron regresar voluntariamente a Guatemala con su hija de 8 años. El padre biológico de Jennifer murió en Guatemala tiempo atrás.
Busca regularización
Jennifer está tratando de regularizar su condición migratoria mediante el Estatus Especial de Inmigrante Juvenil. Su madre tenía planeado enviarla con un pariente a Nueva Jersey, pero Jennifer no quería irse de Iowa. Entonces, el superintendente de las escuelas de Des Moines, Tom Ahart, y su esposa, Jami Bassman Ahart, ofrecieron hospedarla y servir como tutores legales temporales para que pueda terminar la secundaria.
Jami Bassman Ahart dijo que ella y Tom tienen mucho que compartir y "demasiado amor". Los Ahart están recién casados y viven en Des Moines con su hijo de 6 años.
La mujer tenía un vínculo con la madre de Jennifer por una amistad común y una familia que podía contactarse en la prisión en la que se encontraba el padrastro de Jennifer.
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Jami había recaudado provisiones para la familia cuando se enteró de que Jennifer no quería irse a Nueva Jersey, así que le consultó con Tom, quien estuvo de acuerdo con colaborar permitiendo que Jennifer se quedara en su casa.
Los Ahart firmaron con la madre de Jennifer ante un notario los documentos que los convirtieron en tutores legales temporales. También se comunicaron con el abogado de inmigración gratuito de la familia para el seguimiento del trámite de la residencia legal de la menor.
Llegó de forma ilegal
Jennifer Cruzó sola la frontera hace tres años. Su madre había contratado un contrabandista para que la llevara hasta la frontera en 2014. Jennifer fue detenida por agentes fronterizos después de entrar en Texas y pasó una noche en un centro de detención. Su madre se había comunicado con un abogado, quien la sacó de ese lugar y la adolescente tomó después un autobús que la llevó a Iowa.
Los padres no tienen la opción de solicitar la permanencia legal, aun cuando la hermana menor es ciudadana por nacimiento. Sin embargo, Jennifer puede recurrir al Estatus Especial de Inmigrante Juvenil del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS por sus siglas en inglés).
Un juez determinará la condición especial con base en conclusiones de abuso, descuido o abandono. El juez debe fallar que regresar a una persona a su país de origen o tenerlo con los padres no es lo más conveniente para el menor.
Si el estatus está aprobado, Jennifer debe esperar otros cinco años para que pueda solicitar la naturalización. En la actualidad, no podría acceder a un permiso de trabajo ni obtener una licencia de conducir hasta que tenga la condición de residente legal.
Jami ha facilitado un teléfono para que la joven pueda comunicarse con su madre en Guatemala. Los Ahart emprendieron en internet una recaudación de fondos para ayudar a pagar la universidad de Jennifer. La pareja ha recaudado más de 4 mil dólares de la meta de 10 mil.
Tom Ahart dijo desear que Jennifer tenga las mismas oportunidades que su pequeño hijo.
