La semana pasada encontraron a la modelo holandesa de 18 años Ivana Smit sin vida y desnuda en el balcón de un departamento, ubicado en el sexto piso de un lujoso edificio en Kuala Lumpur.
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La policía local inició la investigación, la que a medida que avanza arroja luces sobre una noche de desenfreno y donde un posible crimen no está descartado.
La maniquí, como le decían a Smit, ingresó al edificio junto al multimillonario estadounidense Alexander Amado Johnson, de 45 años y a su esposa Luna de 30 años y de ahí se dirigieron al departamento de la pareja, ubicado en el piso 20.
Confusos hechos
Lo concreto es que fue encontrado el cuerpo de Smit, sin vida y desnudo, sobre el balcón del piso 6 del edificio donde viven los Johnson.
La autopsia arrojó otras luces: la muerte se registró a las 10 horas y la modelo había consumido alcohol, éxtasis y anfetaminas.
Los medios locales aseguran que Johnson asistió a una discoteca junto a Smit y luego, cerca de las 5 de madrugada, llegaron al departamento donde tuvieron una fiesta swinger (intercambio de pareja).
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El novio de Smit, el también modelo Lukas Kramer, aseguró que Ivana le mandó una selfie junto a Luna, esposa de Johnson, con quienes se conocían del mundo del modelaje.
En tanto, el padre de la modelo aseguró a medios europeos que el cadáver de su hija “tenía moretones en el cuello” por lo que creen que se trata de un homicidio.
La policía local, sin embargo, acusó a los Johnson de posesión ilegal de drogas, pero no por un posible crimen.
