Un vuelo cotidiano se transformó en una verdadera pesadilla para los pasajeros de un avión Airbus A320, de la aerolínea AirAsia. La aeronave viajaba desde Perth (Australia) hacia Bali (Indonesia), cuando de pronto la cabina sufrió un problema de presurización que desató el pánico entre la tripulación.
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Tras el despegue y cuando el aparato estaba en velocidad crucero, este se desplomó más de 10 mil metros en cuestión de minutos, provocando que los viajeros se pusieran las máscaras de oxígeno e, incluso, comenzaran a enviar mensajes de despedida a sus seres queridos temiendo lo peor.
Algunos de los pasajeros grabaron el aterrador momento con sus teléfonos celulares. Los videos se hicieron virales horas más tarde.
Afortunadamente, el avión pudo regresar a salvo a Perth, donde algunos pasajeros acusaron a la tripulación de no mantener la compostura durante el incidente.
“El pánico fue mayor debido al comportamiento del personal, que gritaba y parecía llorar”, relató Clare Askew, a Seven News Australia. “Buscábamos seguridad y no obtuvimos ninguna. Estábamos más preocupados por el estado de pánico en que estaban (la tripulación)”, añadió.
“Se pusieron histéricos. No hubo un pánico real antes de eso. Entonces todos entraron en pánico”, dijo Mark Bailey, otro pasajero.
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Después del inquietante incidente, la propia aerolínea emitió un comunicado pidiendo disculpas a los viajeros, afirmando que la compañía está “totalmente comprometida con la seguridad” de sus clientes.
Asimismo, AirAsia felicitó las rápidas maniobras realizadas por los pilotos, quienes cumplieron “con el procedimiento operativo estándar” para aterrizar a salvo.
