Angélica Tista, acompañada de Carlota y Ruth, así como otras mujeres que conforman la Asociación de Mujeres Tejedoras (Amutej), dieron a conocer parte de la cultura Achí, la cual se realza en sus textiles y en la gastronomía, ambos bastiones turísticos y culturales que han heredado de sus antepasados.
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Textiles
En cuanto a los textiles, son varios los productos que las manos artesanas elaboran, principalmente con la técnica que provee el “Telar de cintura”. Este consiste en una especie de faja de cuero que la mujer se coloca en la cintura, y que a su vez sostiene los hilos en los que se tejerán los distintos textiles tradicionales.
Güipiles, cortes, manteles, y hasta servilleteros, se ofrecen como productos terminados tanto a locales como a extranjeros. De hecho, se comentó que los mercados europeos son asiduos compradores de estos.
Gastronomía
Por otra parte, la gastronomía es otra de las joyas mejor guardadas de este pintoresco municipio verapacense. Los boxboles, el pinol, los atoles varios y los dulces, son de los mejores manjares que preparan desde tiempos inmemorables los miguelenses.
Hojas de ayote sembradas junto con las de milpa, son los ingredientes principales para la elaboración de los boxboles. Acompañados de una salsa de pepita de ayote molida, y otra a base de tomate, y un poco de masa, se sirven en hojas de mashán. Aunque también se acostumbra a agregarles ejote cocido.
El pinol es elaborado a base de maíz tostado, chile pimiento, chile guaque, pimienta de castilla, entre otros ingredientes, así como gallina criolla. En la mayoría de lugares donde se vende en San Miguel Chicaj, así como en otros municipios de Baja Verapaz, se sirve en jicaras o recipientes de morros.
El maíz blanco, como en otros lugares del país, es la base del atol blanco. Los miguelenses lo toman con chile o con cacao, teniendo así las opciones de salado y dulce. Ambos son una completa maravilla.
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Los dulces también son una opción muy diferente en este lugar. Existen conservas de manía. El ayote es una excelente opción para quienes desean degustar una merienda distinta.
Esvin Lopez
Así que si no conoces el municipio de San Miguel Chicaj, en Baja Verapaz, no pierdas la oportunidad de ir y visitarlo. Con ello colaborarás con los lugareños a seguir preservando sus costumbres, productos y lugares naturales, y que estos sigan siendo transmitidos a sus hijos y nietas, tal como ha sucedido con ellos, quienes lo heredaron de sus antepasados hace cientos de años.
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