El primer ministro de Somalia, Hasan Ali Khaire, confirmó que unas 110 personas murieron en el sur del país como consecuencia de la dura sequía.
PUBLICIDAD
"Cerca de 110 personas murieron en las últimas 48 horas a causa de la sequía y de las diarreas severas provocadas por el agua en las regiones del sur de Somalia, especialmente en las regiones de Bay y Bakool".
"Los somalíes, estén donde estén, deben salvar a sus hermanos necesitados, que morirán de hambre si no reciben ayuda. La principal tarea del Gobierno será ayudar a la gente afectada por la sequía", añadió el dirigente en un comunicado.
Las autoridades locales del pueblo de Awdiinle, en la región de Bay, comunicaron que al menos 69 personas, en su mayoría niños y ancianos, fallecieron víctimas de las diarreas provocadas por el agua.
Un responsable local de ese pueblo, situado a 30 kilómetros de la capital regional, Baidoa, habló por teléfono con la AFP.
"No hay medicamentos y la enfermedad se ha convertido en epidemia (…) Es por culpa de la sequía, que provocó una penuria de agua. Necesitamos la ayuda de las agencias humanitarias".
Somalia decretó a finales de febrero el estado de "catástrofe nacional" por la sequía que golpea el país y amenaza a cerca de tres millones de personas, según las ONG.
Además, el país es, junto a Yemen y Nigeria, unos de los tres Estados africanos al borde de la hambruna, que ya se ha declarado en Sudán del Sur, donde afecta a 100 mil personas.