En un comunicado, la organización Norwegian Refugee Council precisó que tres de sus empleados yemenitas y un conductor contratado por la organización fueron detenidos por las "autoridades de Hodeida", es decir, rebeldes chiitas hutíes.
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Informaciones anteriores de fuentes locales y de un ministro del presidente yemenita daban cuenta del secuestro de 12 empleados.
La organización explicó que los rebeldes acusan a los empleados de haber distribuido ayuda procedente de Arabia Saudí, archienemigo de los hutíes.
La ONG afirmó, no obstante, que únicamente unas cajas con equipos de higiene llevan la mención "campaña de ayuda del Guardián de las dos mezquitas santas", en referencia al rey Salman de Arabia Saudí.
El Norwegian Refugee Council aseguró que no tiene ningún proyecto de ayuda "financiado por Arabia Saudí" en Yemen y señaló que el reciclaje de este tipo de cajas de distribución de ayuda es una práctica corriente.
Asimismo, la organización pidió a los rebeldes que garanticen la seguridad de sus empleados y añadió que había iniciado contactos para liberarlos.
Fuentes locales habían indicado a la AFP que estas personas fueron secuestradas en una operación de los rebeldes, que las acusaban de distribuir ayuda humanitaria aportada por la coalición árabe, liderada por Arabia Saudí, que combate a los insurgentes hutíes en Yemen desde marzo de 2015.
El ministro yemení de Asuntos Locales, Abdul Raqib Fattah, explicó que los empleados fueron raptados después de que los rebeldes penetraran en los locales de la organización, en el sector de Hali.
