El exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordoñez, quedó vinculado al presunto fraude en la entrada en Bolsa del banco Bankia en 2011, rescatado poco después por el Estado.
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Julio Segura Sánchez, el expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), encargada de regular el funcionamiento de los mercados financieros, también quedó imputado según el auto del tribunal de la Audiencia Nacional consultado por la AFP.
Sin precisar exactamente los delitos que se les imputan, el auto ordena al juez instructor encargado del caso abrir diligencias contra Fernández Ordoñez, gobernador del banco central entre 2006 y 2012, y Segura Sánchez.
Los magistrados hacen suyas las conclusiones de la fiscalía, que en noviembre consideró "que se sacó a bolsa un negocio inviable, la responsabilidad no sería exclusiva de los administradores o del auditor (…) y podría suscitarse la participación de otros actores, señaladamente los responsables del Banco de España que conscientemente habrían cooperado en el mantenimiento del engaño".
Otros seis dirigentes del banco central y de la CNMV de la época también fueron imputados.
Bankia nació a finales de 2010 de la fusión de siete cajas de ahorro en dificultades y en julio de 2011 entró con gran pomposidad en Bolsa bajo el mandato del exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato.
Menos de un año después, su catastrófica situación obligó al gobierno a nacionalizarla e inyectar en ella la mitad de los 41 mil 300 millones prestados por Europa para salvar al sector bancario español.
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El valor de la acción se desplomó arruinando a miles de pequeños accionistas.
El Tribunal Supremo español juzgó en enero de 2016 que las informaciones suministradas durante la entrada bursátil del banco incluían "graves inexactitudes", abriendo la vía a la indemnización de 200.000 pequeños accionistas.
Bankia y su matriz, Banco Financiero de Ahorro (BFA), hicieron una provisión de 1.840 millones de euros para hacer frente a estas reclamaciones.
En 2012 se abrió una causa penal contra Bankia, BFA, Rato y otros 32 responsables del banco por estafa, malversación de fondos y falsedad. En el marco de esta investigación el tribunal ordenó las últimas imputaciones.