La policía de Orlando, en el centro de Florida, capturó el martes al sospechoso de haber matado a un oficial durante un tiroteo y de haber provocado la muerte de otro durante la persecución.
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"¡Lo tenemos! Markeith Loid está en custodia del Departamento de Policía de Orlando", escribió la institución en su cuenta de Twitter.
El caso había generado una espectacular persecución en la llamada 'ciudad bonita' y el Servicio de Alguaciles de Estados Unidos (US Marshals) había ofrecido una recompensa de 125.000 dólares a quien diera pistas sobre su paradero.
La sargento Debra Clayton, que pertenecía al cuerpo policial de Orlando desde hacía 17 años, murió de una herida de bala el lunes por la mañana.
Clayton intentaba arrestar a un sospechoso en el asesinato de una mujer embarazada cuando ella, madre de dos hijos, recibió un tiro.
Cuando perseguía al atacante en motocicleta, un alguacil del condado de Orange fue impactado por un vehículo de frente y falleció poco después en un hospital.
El alcalde de Orlando, Buddy Dyer, declaró un día de luto en la ciudad y varias escuelas de los alrededores fueron cerradas durante la persecución.
