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Cuando era apenas un cachorro, “Kiah” sufrió una brutal lesión en el cráneo luego de que una desalmada persona la golpeara con un martillo. Meses después, su vida dio un giro de 180 grados y pasó de ser un animal maltratado a una heroína de cuatro patas.
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La adorable “Kiah” fue adoptada de un refugio de animales abandonados en Kirby, Texas, por el oficial Brad Croft, del Departamento de Policía de Poughkeespsie, quien le dio un hogar y la ayudó a recuperarse.
“Yo la vi y no podía creer que sobrevivió. Increíblemente, lo hizo“, comentó Croft, quien además se mostró sorprendido por el hecho de que “Kiah”, aun después de su terrible experiencia, no le guardara rencor a los humanos.
El oficial la levó entonces a la organización UniversalK9 (que él dirige), la cual tiene como objetivo entrenar perros para incorporarlos a la policía y al equipo SWAT.
Croft reconoce que “Kiah” fue “difícil de entrenar”, pues no entendía qué hacer, pero pronto demostró sus habilidades.
De hecho, la joven pitbull se volvió tan buena en su trabajo que hasta fue nominada al Premio al Servicio Público de la organización animalista ASPCA.
“Estos premios reconocen el heroísmo de algunos animales, además del lazo que establecen con los seres humanos“, comentó Matt Bershadker, director de ASPCA.
Con información de Publimetro México.