El exconsultor de inteligencia estadounidense Edward Snowden instó a la gente a trabajar junta para protegerse ante la vigilancia intrusiva de los gobiernos y a no temer al futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
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“Si queremos un mundo mejor, no debemos esperar a un Obama ni debemos temer a Donald Trump. Más bien debemos construirlo nosotros mismos”, declaró el jueves por la noche, ante una audiencia holandesa a la que habló por videoconferencia desde Rusia.
Aunque calificó la victoria de Trump en las elecciones estadounidenses de “momento oscuro” en la historia de su país, insistió en que la verdadera pregunta era “¿cómo defendemos los derechos de todos, en todas partes, más allá de las fronteras?”.
Snowden filtró miles de documentos clasificados en 2013, revelando que Estados Unidos puso en marcha una masiva vigilancia de datos privados tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Tras huir de su casa en Hawái, el exanalista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) vive ahora como un fugitivo en Rusia, cuyas autoridades le dieron asilo.
“Intento no ver esto como un asunto relacionado solamente con unas elecciones o un candidato o un Gobierno, porque vemos que esas amenazas atraviesan fronteras”, dijo Snowden a los holandeses que se disponían a ver la película de Oliver Stone sobre su vida.
Snowden aludió, por ejemplo, a una ley rusa, aprobada este año, que obliga a las empresas de internet a guardar los datos de sus usuarios y entregarlos a las agencias gubernamentales, si éstas lo solicitan.
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“Si trabajamos juntos, podemos construir algo mejor y podemos disfrutar de una sociedad más libre y liberal que beneficie a todos”, dijo.
El estadounidense, de 33 años, es reclamado por Estados Unidos, donde podría ser condenado a un máximo 30 años de cárcel por espionaje.
Aunque, según él, sería “una locura descartar” la idea de que Putin pueda cerrar un acuerdo para extraditarle, Snowden dijo que habría permanecido en Hawái si le hubiera preocupado su propia seguridad, añadiendo que es más importante afrontar “los peligros civiles” que acechan a todo el mundo que centrarse en casos individuales.