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Después que se reportara el peor tiroteo en la historia de Estados Unidos que tuvo como saldo 50 muertos, 49 heridos y el tirador atacante en el bar gay “Pulse”; cientos de personas alrededor del mundo se indignaron y enviaron mensajes en apoyo a las familias de las víctimas, distintos mensajes por distintos medios.
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Sin embargo, no todos tradujeron sus deseos en buenos pensamientos: muchos criticaron que la mayoría de las víctimas fueran personas con orientación homosexual. Así fue el caso del pastor de la iglesia bautista Steven L. Anderson de Tempe, Arizona.
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Este, mediante un video publicado en YouTube, señaló que la buena noticia de esta penosa situación es que ahora “había 50 pedófilos menos en las calles”.
Según Anderson, los medios están haciendo un gran alboroto por lo ocurrido con estas personas, quien según él, iban a morir de todas formas víctimas de Sida o sífilis.
El pastor cita versículos bíblicos para justificar el sangriento hecho, efectuado durante la madrugada del domingo 12 de junio, insinuando que no estuvo de todo mal, pues de acuerdo con el pastor, la Biblia dice que los homosexuales deben morir, solo que estas personas no fueron eliminadas de manera correcta.
También sugiere que los cristianos ya no pueden opinar acerca de estas situaciones debido a que son tildados de extremistas, esto a pesar de que estén cumpliendo con los mandatos de Dios.
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De acuerdo con el religioso, los medios están fomentando el odio hacia los creyentes cristianos solo por el hecho de no estar de acuerdo con estas conductas y hablar francamente sobre las ofensas que representa para Dios la homosexualidad.
Por su parte el líder de la iglesia católica, el papa Francisco, el domingo envió un mensaje con motivo del terrible ataque en Orlando, Florida. Condenó al “odio sin sentido” del asesino que atentó contra la vida de estas personas.