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Este martes Estados Unidos celebra primarisa en Nueva York, el escenario donde la carrera por la nominación presidencial de los dos partidos puede comenzar a tomar forma.
Las más recientes encuestas confirman que la favorita para los demócratas es Hillary Clinton, mientras que al magnate Donald Trump parece que nadie le hace sombra para liderar en el estado.
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Los políticos del Partido Demócrata tienen en juego 247 delegados en juegos, mientras los del Partido Demócrata luchan por 95 de ellos. El estado es un trofeo que puede significar un antes y un después para aquellos que quieren lograr la nominación.
Todos los contendientes
Por parte de los Republicanos se enfrentan Donald Trump con 756 delegados, Ted Cruz con 559 y Jonh Kasich, con 144.
Mientras que por la parte demócrata se encuentra Hillary Clinton con mil 289 delegados y Bernie Sanders con mil 45.
La brecha entre los demócratas
A pesar de que la exsecretaria de Estado ha recibido en distintas ocasiones el apoyo de Nueva York y se mantiene a la cabeza de las encuestas, la distancia que la separa de su rival Bernie Sanders cada vez se estrecha más.
Cuando ambos comenzaron su campaña electoral en junio del año pasado era de 60 puntos porcentuales, mientras sondeos actuales señalan que ahora se trata de solo dos.
El candidato que no tiene apoyo en el estado
Debido a las criticas que hizo el republicano Ted Cruz sobre los “valores de Nueva York” con el objetivo de atacar a Trump, el candidato obtuvo el repudio de varios votantes.
Entre sus comentarios, el precandidato no aprobó que la ciudad apoyara al matrimonio gay, el derecho al aborto o sus vínculos con Wall Street.
Los resultados pueden ser un todo o nada para los republicanos
En estas primarias, los republicanos se reparten los delegados proporcionalmente cuando logran al menos un 20 por ciento de votos. Sin embargo, si alguno – como Trump- no solo logra ese porcentaje sino que consigue más de la mitad tiene asegurado 81 delegados.
El voto de otros grupos
Negros y latinos han apoyado la candidatura de la exprimera dama hasta ahora. Por su parte, el discurso que ha manejado Trump no ha funcionado para conseguirle votos a su favor.
