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Ganar una gran cantidad de dinero jugando lotería al parecer sacaría a muchos de sus problemas económicos. Les “arreglaría la vida”. Sin embargo, mantener la vida en orden después de que este deseo se haga realidad, es algo que muy pocos logran. Mal asesorada, una persona puede ser protagonista de muchas tragedias.
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Parece ser que las ganancias mal controladas pueden ocasionar mucho daño en aquellos que, por un momento, tienen un golpe de suerte.
Tal fue el caso de algunos ganadores que no se esperaba terminaran de esa manera. Debido a eso, les presentamos algunas personas con finales no tan felices.
Entre ellos se encuentra David Lee Edwards, un exconvicto estadounidense que en 2001 ganó $27 millones de dólares jugando la lotería Powerball.
Pero la drogadicción y una vida sin limites de gastos dejaron a Edwards y a su esposa Shawna en la quiebra, por lo que ella lo abandonó.
Hacia el final de su vida había perdido hasta el último centavo de su fortuna y murió en 2013, a la edad de 58 años, bajo el cuidado de un hospicio donde lo había llevado un amigo. Esto, de acuerdo con el diario “New York Daily News”.
Historias aparecen en la galería en el siguiente orden:
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– Amanda Clayton la millonaria típica. A sus 24 años ganó un millón de dólares jugando lotería en Michigan, Estados Unidos. Sin embargo, no le bastó y logró que el Gobierno le diera 5 mil 500 en vales de comida. Después de enfrentarse a una demanda en 2012, se le encontró muerta. Al parecer, de una sobredosis.
– Andrew “Jack” Whittaker ya era rico cuando en 2002 ganó casi $315 millones de dólares. Apesar de que quiso compartir el no pudo escapar de sus propios demonios. Acosado por dificultades legales, problemas personales y distintos robos, comenzó a frecuentar clubes de strippers y casinos, en los que perdió una gran parte de su fortuna.
– Evelyn Adams ganó casi 6 millones de dólares con los que decidió viajar a Atlantic City y perderlo en apuestas. Esto hizo que viviera dentro de un tráiler en Nueva Jersey, dejando solo recuerdos de su buena época.
– Abraham Shakespeare ganó un premio de 30 millones de dólares en 2006, pero siguió viviendo su vida de forma muy austera, salvo por una gran casa que se compró. Pero fue asesinado por su novia Dorice Moore, quien luego fue arrestada.
– Americo Lopes ganó en 2012, $38.5 millones que prometió compartir con sus compañeros de trabajo. Sin embargo, luego de renunciar a su trabajo tratando de no hacerlo, al final por orden de la corte, tuvo que dividir su premio.