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El Ministerio del Interior austriaco informó que un amplio número de refugiados decidió regresar a sus países de origen, debido a los malos tratos en Europa.
Entre los desilusionados se encuentran migrantes procedentes de Afganistán, Irak y Kosovo.
Las autoridades indicaron que el número de refugiados que abandonan Europa se incrementó desde enero.
Más de mil personas optaron por salirse por su propia voluntad, entre septiembre y diciembre de este año.
En su mayoría son kosovares, gente que tiene menos posibilidades de obtener asilo debido a que la región de Balcanes no se encuentra actualmente en guerra.
“Solo hemos sido humillados. Fue un error venir aquí, la gente nos mira como si fuéramos terroristas y todo lo que queremos es paz”, declaró un refugiado al diario “The Local”.
“Los perros son mejor tratados que los refugiados en Austria, por lo menos tienen algo bueno para comer”, agregó.