Análisis: Cierre de fronteras en Hungría podría no solucionar crisis migratoria

Después de la reunión de emergencia que convocó el Consejo Europeo este lunes, Hungría declaró el estado de emergencia en su frontera con Serbia. Se han puesto en vigor nuevas leyes, de manera ilegal, motivadas por los intentos de detener a los migrantes que intenten entrar al país. La policía ahora tiene poderes extra e incluso tropas del ejército podrán intervenir con la aprobación del parlamento. Mientras, Alemania y Austria piden al Consejo Europeo una nueva reunión de líderes para la próxima semana. Anne Bathily, alta oficial de políticas del Concilio Europeo de Exiliados y Refugiados explica a este medio su punto de vista sobre la situación.

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Declarar estado de emergencia y cerrar fronteras, ¿es una solución?
– El cerrar fronteras no significa que los refugiados vayan a dejar de llegar. Ellos vendrán, pero las rutas van a ser más peligrosas y caras. Cerrar fronteras es un acto político, temporal (como está consagrado en el Tratado de la Unión Europea), pero definitivamente no es una solución.

¿Cuál es el mensaje que debe ser mandado a los refugiados?
– El ministro del interior alemán, Thomas de Maizière, recordó en la reunión de este lunes que “ellos no pueden elegir el Estado del que quieren protección”. Esto es un recordatorio de la Regulación de Dublín, un sistema que no funciona en la práctica, y se está demostrando. Es difícil de imaginar un sistema donde las elecciones de la gente son completamente ignoradas.

Antes de la reunión del lunes, Alemania declaró poder acoger a un millón de inmigrantes. ¿Puede hacerlo?
– Los demógrafos y los economistas lo piensan, y hace pocos meses que los representantes de los trabajadores alemanes pidieron al gobierno federal que aplique reglas más generosas para permitir a los que buscan asilo trabajar en Alemania. Esa es certeramente una demanda de esta parte ya que el 46% de los empleadores alemanes está teniendo dificultades reclutando trabajadores. De todas formas, la capacidad no solo puede ser reducida por las necesidades del mercad laboral. La capacidad de un país depende también de la calidad de sus sistemas de recepción, asilo e integración. Esto incluye acceso a la vivienda, a los apoyos sociales, al sistema de salud, a las oportunidades educacionales, etc. La situación actual pone, sin duda, al sistema bajo cierta presión. ¿Significa esto que Alemania no tiene la capacidad, o significa que el país no está lo suficientemente preparado? Son dos preguntas distintas que requieren también de respuestas diferentes. La dificultad actual del país para enfrentar la situación no significa que Alemania no tenga la capacidad para recibir a esta cantidad de inmigrantes en el mediano plazo. Lo podemos poner de otra manera: si es que Alemania no tiene la capacidad para recibir a un millón de refugiados, ¿entonces qué país sí la tiene?

¿Cuándo se resolverá esta crisis?
– ¿De qué estamos hablando? ¿Del incremento del número de personas que se ven forzadas a desplazarse en el mundo o del incremento de refugiados e inmigrantes que está llegando a la Unión Europea? La crisis solo se resolverá cuando las razones del porqué la gente sale de sus países desaparezca. Algunos huyen de la violencia política y militar, otros huyen por las malas condiciones económicas de algunos países, algo que también puede ser considerado como violencia. En la Unión Europea, la “crisis de refugiados” solo se resolverá cuando los estados miembros entiendan que ni las vallas ni los muros son solución. La única solución es una respuesta política europea: canales legales para los “migrantes económicos”, rutas seguras para los refugiados, y por un lado solidaridad interna en la Unión Europea, mientras que por otro, medidas diplomáticas y políticas para terminar la guerra y obtener una paz sostenible en los países afectados. Claramente no son soluciones fáciles, pero son las únicas que pueden traer una solución para todos.
 

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