La policía ucraniana y opositores se enfrentaron en el centro de Kiev, donde cerca de 200 mil personas protestaban en la Plaza de la Independencia contra las nuevas leyes que prohíben manifestaciones y refuerzan las sanciones contra los manifestantes.
Muchos de los asistentes llevaban cacerolas, coladores o cajas de cartón en la cabeza o lucían máscaras de carnaval, a modo de burla de estas nuevas leyes, que sancionan a quienes se cubren el rostro para protestar.
Después de una jornada en la cual varios vehículos fueron incendiados y unas cien personas sufrieron heridas, incluyendo a 70 policías, el presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, prometió crear una comisión con representantes de la oposición para poner fin a la crisis política.
Las restricciones aprobadas, que se aplicaban en la época de Stalin a opositores reales o considerados como tales.
Reacción
“No podemos esperar más tiempo: o ganamos o caemos en la dictadura”. Sergey Nelipovich, uno de los ocupantes de la plaza.
Agencias