Foto: AFP
El papa Francisco estuvo el sábado en el hospital católico Bambino Gesu, el centro de investigación pediátrica más grande de Europa, para visitar a decenas de niños hospitalizados, cuatro días antes de Navidad, comprobó la AFP.
El sumo pontífice permaneció allí dos horas y cuarenta minutos. Los niños le entregaron una pequeña canasta que contenía hojas de papel con sus “sueños” y “oraciones”.
“Les agradezco por sus sueños y oraciones, que ustedes han puesto en esta canasta. Se las daremos juntos al Señor que conoce mejor que nadie lo que hay en el fondo de nuestro corazón. Jesús tiene un lazo especial con ustedes, está siempre cerca de vosotros”, dijo, según un comunicado del Vaticano.
El papa había advertido al personal del hospital y a numerosos fotógrafos que quería ir solo a los diferentes servicios: “estoy aquí por los enfermos”, dijo poco después de su llegada.
En el departamento de terapia intensiva expresó su apoyo a los médicos: “lo importante es sembrar, no sabemos cuándo cosecharemos los frutos”, declaró, según la agencia de prensa italiana Ansa.
También visitó un servicio de terapia intensiva neonatal donde son atendidos diez recién nacidos en situaciones muy graves, entre ellas una niña de cinco meses que nació sin intestino, y cuya madre le había escrito.
El hospital Bambino Gesu, donde trabajan 2.600 personas y son hospitalizados anualmente 27.000 pacientes, es propiedad de la Santa Sede.
AFP
